La Zona Rosa es una de los puntos más icónicos de la Ciudad de México, aunque su origen data desde finales de 1880, cuando se crearon las diferentes colonias de la capital del país, entre ellas, la colonia Juárez, donde está ubicada; sin embargo, no muchos saben la razón de su nombre. Aquí te la contamos.
La Zona Rosa se ubica en la alcaldía Cuauhtémoc y la rodean avenidas muy importantes como: Paseo de la Reforma, Chapultepec, Insurgentes y Florencia.
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¿Cuál es la historia de la Zona Rosa?
En este barrio de la colonia Juárez se establecieron familias adineradas que buscaban imitar el estilo de vida europeo, por lo que construyeron mansiones y chalets, cuya arquitectura emulaba los inmuebles franceses de la época.
En entrevista con MILENIO, Enrique Ortiz, divulgador y escritor platicó que las personas buscaban espacios con un menor nivel de hacinamiento, así como un lugar en donde se pudiera respirar aire puro.
“A pesar de su belleza comen los años cincuentas y sesentas, esa colonia fue transformándose con el paso del tiempo en una zona de cafés, galerías, restaurantes, boutique y discotecas. Cambios que posicionaron a la colonia como una de las más bohemios”, explicó.
... pero ¿cómo surge su nombre?
Aunque a ciencia cierta no se sabe cuál es la versión exacta, decía Vicente Leñero, “nuestra Zona Rosa es demasiado tímida para ser roja, pero demasiado atrevida para ser blanca”.
“O también se cuenta que otra posible razón es por que en ese entonces muchas de las edificaciones de ese entonces, estaban pintadas de color rosa, es para seguir con la idea de vivir en una zona europea”, dijo el divulgador.
Durante los años sesentas, los bares y restaurantes de Juárez se convirtieron en el punto de reunión para quienes celebraban las victorias nacionales.
O bien artistas e intelectuales como Manuel Felguérez, José Luis Cuevas, Carlos Monsiváis, Gabriel García Márquez, Carlos Fuentes o Pita Amor entre muchos otros más.
“En el caso de Pita Amor, Podemos destacar que esta poetisa y defensora de derechos de las mujeres salía a las calles de este lugar a regalar poemas y escritos a todo aquel que pasaba por esta zona”, destacó Ortíz.
Tras el terremoto de 1985, muchos bares y restaurantes de la Zona Rosa salieron afectados. Ante ellos tuvieron que emigrar a otras partes de la capital.
Por ello en los años noventas regresaron para darle una actividad económica y turística a la Zona Rosa, dándole así un espacio de libertad en donde todo puede pasar.
Un lugar de libertad para la diversidad sexual
Es las últimas décadas, la comunidad LGBT+, ha adoptado este lugar como un símbolo de lucha, libertad y de diversión.
Ya que actualmente, la mayoría de los bares que trabajan en esta zona, van dirigidos para la diversidad. Como también el punto de reunión para salir a marchar cuando se tiene que exigir derechos humanos en las marchas de la comunidad LGBT+.
FLC