La noche del martes fue larga para decenas de feministas de Marea Verde que decidieron pernoctar afuera del Congreso del Estado de Hidalgo con el fin de evitar que ese lugar, la entrada principal para acceder al recinto legislativo, les fuera negada porque este miércoles, desde primera hora, continuarían exigiendo la aprobación de la Interrupción Legal del Embarazo (ILE), por segunda ocasión.
Entre tortas de jamón, tamales, manzanas, palomitas y una buen trago de ánimo, las mujeres no se acallaron, nunca lo han hecho, así que entre los nervios y la inquietud porque iniciara la sesión, en la que se llevaría la aprobación de esta iniciativa, conectaron la sesión en vivo a un altavoz al que desaprobaban o aplaudían de acuerdo a los comentarios que salían de entre las y los diputados que daban sus razones sobre esta iniciativa.
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Fue después de las 10:30 horas cuando las presentes, así también taxistas que se encontraban en el lugar para esperar su turno de manifestación, guardaron silencio para escuchar la votación que no era anunciada de forma clara ante los dimes y diretes que había en el pleno, pero fue cuando se escuchó "16 votos", y así una voz solo gritó: "¡Ya es ley!" y se desbordó la felicidad.
"Se logró la justicia, justicia para las niñas, las adolescentes, las mujeres hidalguenses que hemos necesitado un aborto y que no nos han apoyado, y que hemos tenido que recurrir a nuestras compañeras; esta ley es justicia a aquellas que murieron durante un proceso, a aquellas que están en las cárceles y también lo es para las compañeras que han luchado por muchos, muchos años para este paso.
"Me parece que esto es un avance en los derechos de las mujeres, igualdad y libertad de decidir por nuestros cuerpos y nuestras vidas, por lo que estoy muy emocionada y contenta de estar en este momento aquí, en este lugar que será parte de la historia", expresó Diana Avilés, quien después no pudo evitar el llanto y abrazó a todas las que pudo, escena que se replicó en cada lugar de la calle Impulsor Sector Primario, en Pachuca, donde se encuentra la entrada al Congreso local.
Las rejas tubulares que rodean al recinto fueron adornadas con moños morados, con pancartas en las que los mensajes eran tajantes: "Que un hombre se olvide de ser padre no genera tanta inconformidad como una mujer que decide no ser madre", "Escucha Provida, mi vida no es tu vida", "En Hidalgo abortamos", así como una serie de carteles donde se exponían las razones para aprobar esta ley.
"Estoy feliz porque yo hubiera querido poder abortar en el estado y tuve que irme a la Ciudad de México, pero me da felicidad saber que nuestras hijas, nuestras hermanas, nuestras sobrinas van a poder tener el derecho de decidir sobre sus cuerpos y eso es una felicidad que no se puede describir.
"Es un acto político tan grande para nosotras en el estado porque llevamos tanto tiempo de luchar y hoy, por fin, dijeron que sí a algo que teníamos derecho de hacer desde siempre", expresó otra activista con lágrimas en los ojos, mientras atrás de ella, los abrazos, los aplausos y las bombas de humo verde rodeaban el espacio en un solo, "porque ya le debían esta ley a las hidalguenses".
Entre el festejo, las feministas invitaron tortas y tamales a periodistas que estaban presentes en el lugar, para después anunciar que tras esta gran noticia, el festejo seguiría en el Reloj Monumental, y así todas recogieron basura, dejaron limpio para después irse en sus autos o transporte público a este sitio emblemático a festejar, "porque ya es ley, es ley y las mujeres hidalguenses son dueñas de su cuerpo".