La procuradora capitalina, Ernestina Godoy, se comprometió a culminar en tres meses con el rezago administrativo de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México para que la Fiscalía inicie operaciones desde cero.
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En entrevista, después de comparecer ante el pleno del Congreso capitalino, la funcionaria local dijo que en breve se creará la Unidad de Rezago, que tendrá como propósito combatir los atrasos en alrededor de 270 mil averiguaciones previas y casi 600 mil carpetas de investigación, así como en la implementación del Sistema Penal Acusatorio.
“Tenemos un programa de abatimiento del rezago. Porque la idea es que la Fiscalía nazca con rezago cero, por lo pronto vamos a tratar en estos meses de hacer un abatimiento con una serie de acuerdo y medidas que se están tomando. Se creará una unidad de rezago para que todo lo que quede todo se haga desde ahí”, puntualizó.
En tribunal y ante los cuestionamientos de los legisladores, Godoy Ramos señaló que está la falta de atención a la Procuraduría “merman sus capacidades, generan desconfianza y abren espacios para el desarrollo de prácticas de corrupción”.
Resaltó que los casos de Norberto Ronquillo, Leonardo Avendaño y Pablo Kúsulas, han servido como modelos para fortalecer las investigaciones de manera científica y profesional, que se realizará en la nueva Fiscalía.
Asimismo dijo que tras la elaboración de dictámenes periciales han logrado “llevar ante jueces de control a los que presumimos con mucha certeza que son los responsables” de estos casos que fueron relevantes para la sociedad.
Mencionó que en 21 años de administración perredista se incrementaron los índices de delincuencia y recibió a la Procuraduría con 241 mil denuncias, número que rebasó el máximo histórico que se tenía en 1997, por lo que ahora están trabajando para disminuirlo.
Agregó que hasta se tienen iniciadas 10 carpetas de investigación por los hechos violentos que se han presentado en las marchas de Ayotzinapa, feministas y 2 de octubre.
Añadió que estas investigaciones son en torno a centros bancarios, restaurantes, tiendas de conveniencia, incluso, “del propio gobierno porque afectaron el templo de Corpus Christi, robaron unas placas y pintaron también”.
Apuntó que las investigaciones para dar con los responsables que se encargaron de destruir y pintar durante las manifestaciones se están realizando de manera coordinada con la Policía de Investigación, la Guardia Nacional y el Centro Nacional de Inteligencia “para no ser injustos, pero sí ser firmes en esto que está pidiendo la ciudadanía”.
“No vamos a criminalizar, pero tampoco vamos a permitir que la violencia se apodere de las manifestaciones que deben ser pacíficas y estamos siendo muy cuidadosos en la Procuraduría, en la ubicación de quienes no estaban haciendo uso de su derecho a manifestar y de protesta, sino estaban realmente destruyendo y sólo fueron a destruir”, agregó.
Al cuestionarle si estaría a favor de modificar la Constitución para que ella pueda ocupar el puesto de Fiscal refirió que “eso se tiene que resolver el Congreso, y yo no tengo voto; todo depende del Congreso”.
Finalmente dijo que a pesar de que algunos piensen que se debe volver a los tiempos “en que la justicia era la mano dura del Estado, se equivocan, eso jamás volverá”, y es que “lo que necesitamos es una mano justa, que esté del lado de la ley, del lado de las víctimas y que castigue a los culpables con pruebas, con evidencias, con legalidad”.
EB