El cónsul en Las Vegas, Estados Unidos, Víctor Alberto Barreras Castro, negó las acusaciones en su contra de presunta agresión sexual, incluso la supuesta víctima reveló documentos e identificaciones oficales que avalan que se trató se un error.
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Luego de que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) suspendió su nombramiento como cónsul, Barreras Castro afirmó que la acusación que se le realizó quedó desestimada, de acuerdo con una carta de la que MILENIO tiene copia.
"Dejo en claro que soy inocente, por eso no tengo antecedentes penales por ese delito ni por algún otro de ninguna naturaleza; la acusación de que fui objeto se basó en acusaciones contradictorias y se desestimó por falta de pruebas.
"En su momento, la menor supuestamente ofendida reconoció públicamente que jamás habíamos tenido relaciones sexuales", indicó en el escrito.
Además, detalló que "los padres de la menor, quienes presentaron la denuncia poco después, reconocieron que se habían equivocado, y ella había mentido".
"Dado que se trata de un delito que se persigue de oficio, este proceso de investigación continuó un par de meses, pero precisamente porque se trata de un delito de oficio es falso que yo hubiere reparado el daño o pagado alguna cantidad para que se desistieran de la acusación. En conclusión, no existieron pruebas en mi contra porque los hechos de los que se me acusó no sucedieron", aclaró.
Barreras Castro argumentó que lo importante es prestar atención siempre a las víctimas sobre todo cuando se trata de violencia sexual y más si son menores de edad.
"No tengo antecedentes penales, jamás he cometido delito alguno, mucho menos una agresión sexual como la que describe la nota", añadió.
Mientras que la supuesta víctima, Yahaira Nataly Castillo Moreno, envió una carta en la que se le señala como afectada por las notas y aseguró que lo ocurrido en 2011 fue que su familia interpueso una denuncia por estupro contra Víctor Alberto Barreras Castro porque ella "de manera inmadura y poco consciente" expresó haber tenido relaciones sexuales con el implicado "cosa que no fue cierta y mentí por motivos, en ese momento personales, por cuestiones académicas".
"Expreso que la acusación que se hizo en ese año fue falsa y sin ningún fundamento, derivado de un enojo por cuestiones académicas", puntualizó.
La madre de Castillo Moreno, María de Los Ángeles Moreno Cepeda, declaró que en ese año se interpuso la denuncia por estupro y que en ese momento no se detuvieron a ver si era real o mentira.
"Llevamos nuestro enojo y frustración a las autoridades; al pasar de los días y con la cabeza fría, pudimos darnos cuenta que estábamos cometiendo un error al señalar al profesor Víctor Barreras puesto que todo era un falsedad de parte de mi hija que en ese momento pasaba por un enojo en la parte maestro-alumno con el profesor", planteó en la carta.
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