Por contrato, CdMx debe seguir pagando renta de vagones de L12 pese a desuso

El contrato hecho durante la gestión de Mario Delgado como secretario de Finanzas indica que se arrendaron 30 carros que dan servicio por 15 años y sólo pueden operar en la Línea 12.

Los trenes aún en desuso continúan costándole a los capitalinos
y Cecilia Ríos
Ciudad de México /

A pesar de que tiene tres meses varada por el desplome de un tramo de su viaducto elevado, la Línea 12 sigue costando a los capitalinos. La renta de sus trenes del 3 de mayo a la fecha asciende a 495 millones de pesos.

El contrato hecho por la Secretaría de Finanzas que encabezaba Mario Delgado durante el gobierno de Marcelo Ebrard, es único en la estructura del Metro, toda vez que se arrendaron los 30 carros que dan servicio por un periodo de 180 meses, es decir, 15 años, y sólo se pueden operar en ella.

La Línea 12, que desde su apertura parcial tuvo problemas en rieles, obra civil, compatibilidad de vías y vagones, ha estado fuera de servicio en tres ocasiones por un lapso de 24 meses que ha tenido un costo el erario de 4 mil 111 millones 250 mil pesos.

Las primeras dos ocurrieron en el sexenio de Miguel Ángel Mancera, que tras 14 meses de funcionamiento, el entonces director del Metro, Joel Ortega, decidió cerrar la llamada Línea Dorada para su rehabilitación por el desgaste ondulatorio que se registró a lo largo de la línea por la incompatibilidad de trenes y vías.

Los trabajos de reparación duraron 20 meses y por decisión de Ortega y del secretario de Obras y Servicios local, Alfredo Hernández, se sobrecargó la vía hasta con 9 mil toneladas.

Los 30 trenes que corrían por la Línea 12 fueron guardados en los talleres de Tláhuac y/o en los andenes, pero aún sin dar servicio el gobierno capitalino desembolsó 3 mil 451 millones 250 mil pesos.

Tras los sismos de septiembre de 2017 en la Ciudad de México las autoridades de la ciudad determinaron el cierre de la Línea Dorada, para supervisar y atender los daños ocasionados.

Los trabajos duraron apenas un mes, mientras que los trenes tuvieron el mismo destino que en la rehabilitación anterior, pero esta vez costó 165 millones de pesos.

La renta de los 30 trenes varados en estos dos incidentes por 21 meses tuvo un costo de 3 mil 616 millones 250 mil pesos.

Si a esto se le suma los tres meses sin servicio por el desplome de un tramo en el viaducto elevado entre las estaciones Nopalera y Olivos, por 495 millones de pesos, el gran total de los 24 meses es de 4 mil 111 millones 250 mil de pesos.

Y seguirá costando

El contrato por 15 años se finalizará hasta 2026 y hasta ese momento el gobierno de Ciudad de México deberá cumplir con el pago de la renta de los trenes a CAF vía Provetren, creada exclusivamente para esta transacción.

El presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a que en un año Carso, propiedad de Carlos Slim, reparará sin cargo al erario el tramo colapsado y estimó que los trabajos duren un año, aunque no anunció fecha de inicio de los trabajos.

Así, y de acuerdo con el contrato entre la Secretaría de Finanzas, CAF México y Provetren, en su apartado "Distribución del presupuesto aprobado por la Secretaría de Finanzas del GDF", el precio de los trenes varados durante ese periodo tendrá un costo de mil 980 millones de pesos.

Además de que en 2022 se avecina el año con el monto más elevado de pago con 2 mil 145 millones de pesos.

Los recursos para más vacunas

Los recursos que se han destinado para pagar la renta de trenes que no estarán en funcionamiento durante 24 meses equivalen a tres veces el presupuesto para la Presidencia y al fondo para la rehabilitación de todas las escuelas dañadas tras los sismos de septiembre de 2017.

El gobierno federal y de Ciudad de México anunciaron un programa para reparar las escuelas dañadas tras los terremotos de 2017, para los que la Secretaría de Educación Pública destinó 4 mil millones de pesos.

De acuerdo con el Proyecto de Egresos de este año, se destinó mil 555 millones 760 mil pesos para la operación de las funciones de la Presidencia tres veces menor al arrendamiento de los trenes, o bien, es dos veces más que lo que gastó el entonces presidente, Enrique Peña Nieto, en 2015 con 2 mil 296 millones 227 mil 33 pesos.

Asimismo, el pago de trenes que no están en funcionamiento equivale al fondo de 4 mil millones de pesos que destinó Hacienda para la compra de vacunas contra el covid-19, que de acuerdo con el entonces secretario Arturo Herrera, alcanzarían para inmunizar a toda la población.

FS

  • Israel Navarro
  • israel.navarro@milenio.com
  • Licenciado en Comunicación y Periodismo por la UNAM. Reportero de Grupo MILENIO desde hace más de 10 años asignado a temas de política y crimen organizado.

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