El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, advirtió que una reforma electoral “mal planeada” y basada en “filias, fobias y rencores” podría afectar la equidad en las elecciones, el pluralismo y la rendición de cuentas, por lo que consideró indispensable analizar la fórmula constitucional con la que se define el financiamiento a los partidos políticos, pero con una visión integral.
“Si se da ese debate aislado o como parte de una reforma electoral mal planeada, las prerrogativas de los partidos políticos adolecerían en su definición y visión de futuro, un análisis integral. No se trata, en ese sentido, me parece, de acordar únicamente una cifra o un porcentaje para disminuir el monto de los recursos públicos que reciben los partidos políticos cada año.
“Se trata de revisar, integralmente las modalidades de ese modelo de financiamiento y el impacto que eventualmente tendrían las eventuales modificaciones en la calidad y la equidad de las elecciones, en la convivencia democrática, en el pluralismo político y en la rendición de cuentas. Una reforma hecha a partir de objetivos de parte o de partido con base en filias y fobias a partir de rencores o enconos personales o de partido está condenada al fracaso y hacer inevitablemente regresiva”.
Al aprobar más de 5 mil 821 millones de pesos para distribuir en el 2022 entre los partidos políticos que conserven su registro nacional con la aclaración de que este monto no lo define el INE sino una norma constitucional, el consejero presidente consideró importante reflexionar sobre este tema ante “las reiteradas menciones” sobre una eventual reforma electoral.
Recordó que se llegó a esta fórmula con la idea de que cerrarle la puerta al financiamiento privado y así, poder transparentar los gastos de campaña, fiscalizarlos y poner límites. La fórmula insistió, fue simplificada en la reforma electoral del 2007-2008 y en el 2014 no tuvo modificaciones y se replicó en las 32 entidades federativas.
“Y hay que decirlo, en ninguna se planteó disminuir tales prerrogativas. Por el contrario, diversos académicos y especialistas han señalado que las mismas propiciaron que se incrementara y casi se duplicara el dinero público que se entrega a los partidos políticos año con año, a través del financiamiento local que se incrementó en 2014 de manera consistente”.
Señaló que si bien el país atraviesa por una situación económica difícil producto de la pandemia, hay “suficiente evidencia histórica” que acredita que el modelo vigente ha evitado que los intereses particulares y el dinero privado se impongan sobre la autonomía que propician los recursos públicos.
Córdova destacó que en los últimos años se ha evidenciado que el dinero si bien es indispensable en las campañas, no es determinante para el triunfo en las urnas. “En México no gana el que gasta más, sino el candidato o candidata que conecta mejor con la ciudadanía”.
Por lo que insistió en la necesidad de revisar el modelo pero tener en cuenta los riesgos del financiamiento privado.
“Es pertinente que se propicie un debate nacional sobre el financiamiento a la política, constructivo, con altura de miras, con visión de Estado. Un debate sobre el modelo de financiamiento de la política pero exento de revanchas, filias y fobias, de mentiras que contaminan y distorsionan la conversación pública”, reiteró.
JLMR