Corrupción no se ha acabado en México y sigue creciendo, advierte SNA

Advirtió que la corrupción es un problema que afecta la calidad de vida de las personas, mina a las instituciones públicas y evita que hagan más efectivo su trabajo.

Francisco Raúl Álvarez Córdoba, presidente del SNA, en un foro. | Rafael Montes
Rafael Montes
Ciudad de México /

La corrupción en México no se ha acabado y sigue creciendo, por lo que difícilmente se acabará, aseguró el presidente del Sistema Nacional Anticorrupción, Francisco Raúl Álvarez Córdoba, en el marco del Día Internacional contra la Corrupción, que se celebra este 9 de diciembre.

En entrevista con MILENIO, luego de instalar por primera vez la Asamblea General del SNA (SNA), con la participación de la mayoría de los presidentes de los sistemas estatales anticorrupción, Álvarez Córdoba afirmó que el problema de la corrupción en México no se resuelve desde una sola instancia de gobierno, sino que se debe enfrentar dotando de autonomía a los poderes públicos y abriendo espacios de participación ciudadana.

“No, la corrupción no se ha acabado, ni en México ni en el mundo y difícilmente se acabará. Es un problema público que hay que gestionar, que hay que controlar, con transparencia, con rendición de cuentas, dotando de la suficiente autonomía a los poderes públicos, abriendo espacios de participación ciudadana y no, definitivamente no se ha acabado”, dijo el también presidente del Comité de Participación Ciudadana del SNA, cabeza del mecanismo.
“El sistema no depende necesariamente del Ejecutivo federal, sino del Consejo de la Judicatura Federal, la Secretaría de la Función Pública, de la Auditoría Superior de la Federación, del Comité de Participación Ciudadana, entre otros, que, en conjunto, te puedo decir que todas y todos los integrantes del comité coordinador tienen la voluntad de avanzar los temas anticorrupción, tienen un compromiso decidido y hemos estado trabajando con ellos justamente para fortalecer las estrategias asociadas a la Política Nacional Anticorrupción”, aseguró.

El presidente del SNA explicó que la Asamblea General será un espacio de deliberación federal, en donde se escuchen las voces de todos los estados del país, y no sólo nacional, para poder fijar el rumbo sobre temas donde prevalece la corrupción, como los programas sociales y las compras públicas.

Álvarez advirtió que la corrupción es un problema que afecta la calidad de vida de las personas, mina a las instituciones públicas y evita que éstas puedan hacer de forma más efectiva su trabajo.

“Este tipo de espacios públicos, este tipo de sistemas nos ayuda mucho a visibilizar que el problema sigue creciendo, que como sociedad mexicana no lo hemos podido contener, pero tenemos las instituciones, tenemos las leyes, tenemos las personas dispuestas para poder alcanzar objetivos que tanto estamos reclamando”, afirmó.

La Asamblea General se instaló ayer, luego de más de cinco años de que entraron en vigor las leyes que le dieron vida al SNA, y se reunirá una vez al año de manera ordinaria, por lo que la próxima sesión se celebrará en el estado de Guerrero en diciembre de 2023.

LP

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