Las inconformidades en Morena por la debilidad institucional que enfrenta el partido en el gobierno y las permanentes inconformidades por la selección de candidatos a través de encuestas, llevó a un grupo de al menos 3 mil militantes de base a convocar a la convención nacional morenista.
Con expositores confirmados como Pedro Salmerón, Irma Eréndira Sandoval, John Ackerman, Enrique Semo, Víctor Toledo, Bernardo Bátiz y Jesusa Rodríguez, entre otros, y ubicados en el ala más dura de Morena, los firmantes del manifiesto Morena: Momento de Definiciones, se reunirán el 5 de febrero en el Monumento a la Revolución para debatir la situación interna del partido. Una invitación al margen de los órganos del partido.
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La convocatoria para la convención nacional morenista advierte que la “enorme popularidad de Morena contrasta con su profunda debilidad institucional”, por lo que es necesaria la revisión de sus documentos básicos, declaración de principios, programa y estatuto.
Denunciaron que estos, “son violados de manera sistemática y con absoluta impunidad por la cúpula del partido. Los cuerpos colegiados sesionan de manera apresurada y a puerta cerrada en reuniones donde la reflexión y el debate son desalentados y estigmatizados. No hay un padrón confiable de afiliados, el proceso de selección de candidaturas es opaco y discrecional y la militancia es excluida de las decisiones estratégicas del partido”.
Los convocantes a la Convención Nacional (nombre que utilizó el EZLN en 1994 y Andrés Manuel López Obrador tras la elección de 2006) señalaron que en Morena, “este río revuelto ha generado enormes ganancias para los oportunistas y los chapulines, lo cual pone en riesgo la viabilidad histórica del partido como “una organización política amplia, plural, incluyente y de izquierda”.
Por ello, presentaron el posicionamiento en el que destacaron que “cada vez son más comunes las situaciones en que los documentos básicos del partido se convierten en letra muerta frente a pactos o acuerdos políticos cupulares”.
Sin mencionar a Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, destacaron que “se ha construido una estructura paralela extra-estatutaria que busca anular la estructura formal del partido”.
No obstante, aseguraron que “nuestros esfuerzos no se dirigen en contra de nadie en particular ni buscan dividir al partido, sino que apuestan a la institucionalidad y la unidad dentro del movimiento. Las divisiones internas actuales son consecuencia precisamente de la falta de respeto a los documentos básicos”.
Asimismo, recalcaron que “las decisiones estratégicas no se consultan con las bases ni se informan a la militancia. Los cuerpos colegiados sesionan de manera apresurada y a puerta cerrada en reuniones donde la reflexión y el debate son desalentados y estigmatizados”.
Respecto a la definición de candidaturas a través de encuestas, destacaron que “se ha vuelto un coto cerrado de una pequeña élite que suele privilegiar a los oportunistas socios o familiares por encima de militantes con trayectorias sólidas y propuestas de transformación social”.
Entre las propuestas que buscan llevar a la Convención están, la del respeto a los documentos básicos; la transparencia absoluta en las etapas de la definición de candidaturas, desde sus metodologías hasta la ponderación de las respuestas. También plantearon la necesidad de renovar la Comisión Nacional de Elecciones.
Aunque integrantes del ala democrática de Morena, corriente impulsada por Alejandro Rojas Díaz Durán, senador suplente de Ricardo Monreal, llama a Pedro Miguel, Rafael Barajas “El fisgón”, Paco Ignacio Taibo, entre otros a que se sumen a la Convención, lo cierto es que sus nombres no figuran entre los convocantes.
En su mensaje, Rojas Díaz Durán, fue categórico en su rechazo a que Morena mantenga las encuestas como mecanismo de elección de los candidatos. Planteó la reforma estatutaria para eliminar las imposiciones que se promueven desde la Comisión Nacional de Elecciones de Morena.
Los convocantes a este evento político que busca incidir en la actual situación imperante en Morena señalaron que la primera convención nacional morenista está pensada como un punto de arranque para un proceso más amplio de articulación y unión de esfuerzos a favor del rescate del principal instrumento político de la cuarta transformación. A partir de una evaluación de los resultados del encuentro del 5 de febrero, se acordarán las acciones y los mecanismos necesarios para dar continuidad al diálogo y el trabajo en conjunto.
FS