El gobierno interino de Bolivia presentó una "protesta formal" ante México por los dichos del ex presidente Evo Morales tras su llegada al país como asilado político, las cuales a juicio de La Paz "contravienen" su condición de refugiado según informó la cancillería de aquel país en un comunicado.
Bolivia le expresó además "su profunda molestia" por permitirle al ex presidente efectuar declaraciones que evidencian su "actividad conspirativa" contra el gobierno que dirige la derechista Jeanine Áñez, anota la declaración.
"Expresó además su profunda molestia, pidiendo que se cumpla con estas normas y principios del Derecho Internacional, honrando los lazos de cooperación y amistad que históricamente han caracterizado la relación entre ambos países", informó la cancillería.
Evo Morales Ayma llegó a México el 12 de noviembre tras dimitir como presidente de Bolivia, en medio de una ola de manifestaciones y ante la presión de las fuerzas armadas para reponer el proceso electoral en el que resultó electo para un cuarto mandato.
Esta semana, el ex presidente convocó a una conferencia de prensa, en la que denunció que la represión que se vive en su país ha dejado un saldo de 30 muertos y calificó estos actos como "genocidio". "En Bolivia están matando a mis hermanos", agregó.
Además, pidió construir una Comisión de la Verdad para aclarar lo sucedido el 20 de octubre y llamó a organismos internacionales a intervenir en un diálogo para pacificar al país.
nerc