El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó los testimonios de los diplomáticos Raquel Serur, Roberto Canseco y Eva Martha Balbuena, quienes vivieron la irrupción de la policía ecuatoriana en la embajada de México en Quito.
En conferencia de prensa, el mandatario indicó que las declaraciones de los funcionarios permiten "rendirles un homenaje por lo que hicieron, porque dejaron en alto el nombre de nuestro país, de nuestra soberanía (...) y del derecho internacional".
El viernes 5 de abril, un grupo de policías de Ecuador irrumpió a la fuerza en la embajada de México en Quito, donde se encontraba el ex vicepresidente Jorge Glas.
La incursión ocurrió horas después de que el gobierno mexicano le concediera asilo político al ex funcionario ecuatoriano en medio de tensiones diplomáticas entre ambos países.
Diplomáticos narran cómo fue la irrupción en Quito
Al respecto, Raquel Serur Smeke, embajadora de México en Ecuador, consideró que las autoridades de aquél país estaban esperando que ella saliera, o que salieran todos, para proceder.
Roberto Canseco, jefe de Cancillería y Asuntos Políticos de México en Ecuador y quien enfrentó la irrupción, escuchó "un ruido muy fuerte" y de inmediato "imaginó que estaban tratando de entrar por la fuerza al edificio de la embajada".
"Percibí que la situación estaba grave cuando escuchamos el ruido. Cuando damos la vuelta, porque se tenía que ir por un pasillo, (...) ahí ya veo que sometieron al guardia", relató Eva Martha Balbuena, jefa administrativa en la Embajada de México en Ecuador.
Canseco visualizó al guardia boca a abajo, en el pasto, y con "un intruso que lo tenía amagado".
"Yo voy a tratar de ayudar para que él (Canseco) se libere porque había dos personas que lo estaban deteniendo y estaba agarrado del quicio de la puerta, impidiendo que ellos pasaran", comentó Eva Martha Balbuena.
Un policía me apuntó con un arma: Roberto Canseco
El jefe de Cancillería señaló que los policías lo empujaron y fue en ese momento donde recibió un golpe en el ojo. "Tengo una marca aquí porque fue con un escudo que llegaba hasta mi cabeza".
"Sale un intruso (un policía) y me doy cuenta de que van a abrir nuevamente la puerta, muevo un librero para impedir que ingresen, en eso me quitan a mí, mueven el librero, yo opongo resistencia lo más que puedo y me retiran hacia el fondo de la biblioteca. Un guardia entra y me apunta con un arma".
Desesperada, Eva Balbuena solicitó hablar con la embajadora de México, porque se trataba de una emergencia, y le comentó que se habían llevado al ex vicepresidente de Ecuador.
"Contesto y me dice Martha: entraron a la embajada, se están llevando al ministro, lo están sometiendo. Me iba describiendo lo que pasaba y yo le decía: ¿qué? No, no, no puede ser, ¿cómo?", comentó la embajadora Raquel Serur.
AMLO difunde videos de irrupción
Canseco indicó que, luego de que se llevaran al ex funcionario ecuatoriano, fue corriendo hacia la puerta y pudo observar un vehículo.
"Lo iban a meter (a Jorge Glas) en ese vehículo. Me impresiona porque ya era adentro de la embajada, no entendía, después comprendimos que entraron por la avenida Naciones Unidas y de reversa lo colocaron en frente. Todavía alcanzo a ver que lo suben a ese vehículo y arranca", comentó el diplomático mexicano.
Arriar la bandera te hace sentir derrotado: Eva Balbuena
La jefa administrativa en la Embajada de México en Ecuador se mostró triste al comentar que arriar la bandera, es decir, cuando fue bajada del asta, le causó un sentimiento de derrota.
"El hecho de ver cuando arriamos la bandera, te sientes de cierta forma derrotado, no sé, impotente. Tengo bastantes años en el servicio exterior y sí, para mí ha sido el momento más triste de mi carrera", comentó Balbuena.
Diplomáticos agradecen apoyo al regresar a México
Raquel Serur expresó gratitud hacia todas las personas que los apoyaron en los momentos más complicados, a la canciller Alicia Bárcena y al presidente López Obrador.
"Al llegar a México siente uno que es una situación diferente, se siente uno en casa y ver el recibimiento de la propia canciller en la puerta de la entrada al aeropuerto es una sensación extraordinaria", dijo Roberto Canseco.
ROA