Tras 11 días, vuelve Edmundo Jacobo al INE, el primero en ‘vencer’ al ‘Plan B’

El secretario ejecutivo reconoció que ni siquiera entiende bien sus nuevas funciones tras la reforma y las impugnaciones.

Edmundo Jacobo regresó ayer a su cargo como secretario ejecutivo del INE. | Cuartoscuro
Jannet López Ponce
Ciudad de México /

Fue la sesión de la victoria, aunque Morena la calificó de “pírrica”. Las sonrisas eran incesantes y el regodeo estaba desbordado. A tan sólo 11 días de su despido y envuelto en aplausos, agradecimientos y halagos, Edmundo Jacobo volvió a la silla que ha ocupado por 14 años, con el triunfo del primer revés legal al Plan B de la reforma electoral, aunque ni siquiera tuviera claro cuáles serán sus nuevas funciones.

Así se restituye a un funcionario probo y comprometido, a quien la democracia le debe mucho”, dijo el consejero presidente, Lorenzo Córdova, quien auguró que este sólo es el principio de próximas y muchas victorias más.

Alrededor de las 09:00 horas, Edmundo Jacobo recibió la notificación oficial de la jueza Blanca Lobo, quien el viernes le concedió una suspensión definitiva que ordenaba “que se mantengan las cosas en el estado en que se encontraban antes de la emisión de la norma impugnada, es decir, para que la parte quejosa continúe en el cargo que ocupaba”, tras considerar en un análisis provisional, que se trata de una inconstitucionalidad.

De la mano de su esposa, Edmundo Jacobo volvió al Consejo General del INE, donde le llovieron aplausos y halagos. En su primer mensaje, luego de su fugaz despido, el funcionario pidió a las y los trabajadores que ya han sido y se seguirán viendo afectados por los recortes de esta reforma electoral, que tengan paciencia y lo vieran como un ejemplo de que el orden constitucional y legal será repuesto.

Y confió en que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación falle a su favor para afianzar la certeza jurídica a la Secretaría Ejecutiva y para no acercarse “a la ley del más fuerte, con la dosis de arbitrariedad que ello significa”, y que junto con la Suprema Corte de Justicia de la Nación “de lo que definan, dependerá la forma en que se organicen las elecciones en los años venideros, con las consecuencias que implica”.

Sin embargo, al término de la sesión, Jacobo Molina reconoció que, hasta ahora, ni él mismo tiene claro en qué consistirán sus funciones con la reducción de facultades que prevé la reforma electoral.

“En este momento lo que está vigente es el Plan B que lo que hace es reducir las atribuciones del secretario ejecutivo y el Consejo General tendrá que definir qué es lo que quiere decir el legislador en el Plan B con eso de que el secretario se convierte en un auxiliar y está por definirse qué es eso.
“Ahorita ni a mí me queda suficientemente claro cuál es la tarea que le quieren asignar a la Secretaría Ejecutiva, antes estaban muy definidas y hay algunas que no se pueden echar abajo porque están en la Constitución, como que sea el secretario del Consejo o el representante legal. Esto tendría que quedar definido a finales de agosto”, explicó.

Pero no todo fueron sonrisas, también hubo quejas y manoteos, y la réplica esperó hasta el final. El suplente de Morena, Euripides Flores, acusó que se trataba de una victoria pírrica y una puesta en escena, pues “contrario a lo que aquí se quiere vender, el Plan B sigue firme y le quitó todas las facultades administrativas a la Secretaría Ejecutiva, así que el secretario ya no es el dueño y señor de los dineros del INE, regresa a un cascarón vacío”.

La diputada Julieta Ramírez, nueva consejera de Morena por parte del Poder Legislativo, se estrenó en la sesión, lanzando calificativos como “sinvergüenzas”, “no demócratas”, y señaló que “en un nuevo agandalle, se creen dueños, amos y señores de la democracia, pero en realidad con los secuestradores del INE”.

“No se froten las manos ni canten victoria, porque la última palabra no está dicha, el Plan B se va a lograr, aún pese a ustedes y la historia los juzgará como los peores árbitros electorales en la historia del INE, no se van a salir con la suya”, dijo.

La consejera Dania Ravel replicó a las acusaciones, dejando claro que “el Plan B sí lesiona los derechos de la ciudadanía, el Plan B atenta contra la autonomía e independencia del Instituto Nacional Electoral, merma el sistema de fiscalización que tenemos, está atentando contra la fiscalización en tiempo real que hemos construido, está quitándole sanciones a los partidos políticos.

“No vamos a poder sancionar a aquellas personas que no presenten un informe de gastos de precampaña, está mermando la eficacia del sistema de fiscalización y, por lo tanto, también está mermando la equidad en las contiendas. Y no está garantizando un piso parejo”, sostuvo.

La sesión concluyó con una nueva ronda de aplausos, que el suplente de Morena no resistió y prefirió abandonar el salón, dejando a sus asistente para que recogiera sus documentos, libretas, plumas y hojas con apuntes de la mesa del consejo, mientras su compañera diputada morenista fue la única que se guardó los aplausos para el primer funcionario que logró llevarle la contraria legal a la reforma electoral.


LP

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