Luego de que el senador Samuel García pidiera a los diputados locales su destitución, así como una multa de 80 millones de pesos, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón dijo no temerle a un juicio político en su contra.
Lo anterior, ante el ordenamiento que hizo el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para que se sancionara a Rodríguez Calderón y a Manuel González, secretario General de Gobierno, por haber encontrado desvío de recursos al detectar que trabajadores estatales apoyaron su campaña presidencial con el levantamiento de firmas en días y horas laborales.
Al respecto, el mandatario estatal insistió en que el Congreso local no está facultado para interponerle un castigo.
¿No teme que le hagan un juicio político?, se le cuestionó.
"No temo nada, teme aquel que ha hecho daño, yo no tengo temor, será el ejercicio de la ley, el Congreso no está facultado para sancionarme", respondió.
Rodríguez Calderón aseguró que algunos de los funcionarios estatales señalados por el Tribunal ya fueron sancionados por la Contraloría del Estado.
En cuanto a la presión que ejerció el senador Samuel García para su destitución, el gobernador aseguró que éste lo hace solo para acaparar reflectores en los medios de comunicación dada su intención de buscar la gubernatura.
"Yo le preguntaría a Samuel ¿Cuántas leyes ha aprobado? ¿Qué ha hecho por Nuevo León? ¿Qué beneficio le ha traído a Nuevo León que Samuel sea senador?, yo no he visto ninguno", cuestionó.
"Creo que a Samuel le urge eso (la destitución), pero no ha entendido que la ley no es a su disposición, yo no cometí ningún delito, nadie le puede coartar su libertad a nadie", concluyó.