Por primera vez desde que fue recluido en el penal número 2 de Apodaca hace tres semanas, el ex gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón recibió la visita de dos de sus hijas.
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Zoraida y Jimena, hijas de los dos primeros matrimonios del ex mandatario, acudieron a la penitenciaría acompañando a la actual esposa, Adalina Dávalos Martínez.
Junto con ellas arribó, al filo de las 11:00, uno de los hermanos de Jaime, y permanecieron en la visita por espacio de dos horas y media.
En entrevista afuera del penal, Adalina Dávalos detalló que su esposo ha perdido peso por la dieta que ha seguido por indicaciones de sus médicos de cabecera.
"Ha bajado de peso por el tipo de alimento que le están dando y que lo requiere por la dieta que le ponen los médicos. Está tranquilo, hoy platicamos de muchas cosas, anécdotas, sus hijas, mi cuñado y yo, entonces, dentro de lo que cabe está bien.
"Estuvimos prácticamente incomunicados (durante el fin de semana pasado), porque solamente de lunes a viernes podemos tener noticias. Él sí se empezó a sentir un poquito mal, por eso vino el doctor, pero está bien, está estable y está medicado, como todos los internos adentro”.
Cuestionada sobre si el ex gobernador le ha pedido abiertamente ser trasladado a un hospital de la localidad para una mejor atención, Dávalos respondió que no se lo ha manifestado de manera alarmante.
"Al día de hoy no me lo dice tan alarmante (sobre si requiere el traslado a algún hospital), le tuvieron que cambiar un poquito los medicamentos, el antibiótico le estaba causando problemas", comentó.
Por último, también se trató de abordar el tema de la negativa de su amparo, a lo cual la esposa del ex gobernador prefirió no hablar y dejarlo en manos de quien lleva su defensa legal.