Avance de ómicron provocó que la gente comenzara a sucumbir ante el miedo: UNAM

De acuerdo con la UNAM, la covid-19 impacta en el bienestar físico y emocional, lo que ha provocado la presencia del fenómeno de la “visión de túnel”.

El miedo, la otra secuela de la pandemia: UNAM | Jorge Carballo
Karla Guerrero
Ciudad de México /

Ante el rápido avance de la variante ómicron, la gente comenzó a sucumbirse al miedo y a “sentirse nerviosa” tras la rápida virulencia de la nueva cepa que pone en “una situación extraña” y de amenaza a la salud del ser humano, informó la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

De acuerdo a la máxima casa de estudios, el covid-19 impacta en el bienestar físico y emocional, lo que ha provocado la presencia del fenómeno de la “visión de túnel”, que consiste en enfocar la atención hacia la amenaza, incurriendo a la salud del humano, en cuadros de tensión y estrés, “por una gestión inadecuada de nuestros temores”.

La profesora de la Facultad de Psicología (FP) de la UNAM Melisa Chávez Guerrero advirtió que "la aparición de ómicron fue intempestiva y de ahí que resulte tan desconcertante. ¿En qué sentido?, en que empezó a distribuirse muy rápido y en tiempos mucho más cortos”, lo cual ha provocado que en unos cuantos días tengamos conocimiento de personas conocidas infectadas o bajo sospecha de tener covid-19, lo cual nos genera una sensación de círculo que se estrecha.

“El riesgo es que nuestra atención se focalice sólo en la pandemia y en la amenaza que nos representa. Si nos colocamos en ese escenario es muy probable que sucumbamos al miedo y soslayemos el entorno. Ese fenómeno es conocido como ‘visión de túnel’, e implica una tendencia a ver sólo lo que tenemos enfrente y volvernos ciegos a lo demás”, dijo

Ante la información en cuanto al número de contagios y fallecimientos, la especialista universitaria recomendó mesura ante el salud de datos y mantener la calma en todo lugar, lo cual podría coadyuvar a disminuir el impacto de ómicron en la salud mental.

En tanto, sugiere “darnos un respiro” y realizar otras actividades como ver en televisión algo que nos relaje, armar rompecabezas, convivir con la familia y retomar hábitos que la pandemia nos hizo olvidar, por ejemplo reír.

 “Eso no implica que desestimemos la severidad de la covid-19 o que consideremos que, porque nos dijeron que ómicron es más leve, dejemos de preocuparnos. Es preciso seguir en esta ruta de cuidarnos e incluye atender tanto lo físico como lo mental”.

LG 

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