Un juez de control vinculó a proceso a María Eugenia Maru Campos Galván, tras acreditar el desvío de recursos de la Secretaría de Hacienda y la entrega de dinero por una “nómina secreta”, validando así las pruebas entregadas por el Ministerio Público.
La vinculación a proceso es por el delito de cohecho en consumación continuada a título de autores, tanto para la alcaldesa con licencia, así como para una ex diputada del Partido Verde y un ex diputado del PRI.
El juez estimó que la mayoría de las pruebas presentadas por el Ministerio Público no fueron controvertidas por la defensa. Para la vinculación a proceso, el juzgador tomó en cuenta las irregularidades en el contrato de servicios para el hermano de la alcaldesa, quien recibió un millón 67 mil pesos en transferencias.
Además, corroboró la teoría de la Fiscalía respecto a la forma en que operó el desvío de recursos públicos por medio de la llamada “nómina secreta” o caja chica, durante todo el tiempo en Campos fue legisladora.
También, se puso a consideración un informe detallado sobre todas las ocasiones en que las ex diputadas y el exdiputado aprobaron y firmaron diversas iniciativas del ex gobernador de Chihuahua César Duarte.
María Eugenia es acusada de recibir indebidamente más de 9 millones de pesos, entre 2014 y 2015.
Luego de la celebración de la audiencia de vinculación a proceso, Campos Galván dio un mensaje a los medios de comunicación, en el que reiteró que la vinculación no significa culpabilidad, ni que pese sobre ella alguna sentencia, por lo que sus derechos políticos se encuentran a salvo.
“La vinculación a proceso que hoy se ha definido no significa que se haya dado la razón al Ministerio Público, ni significa que se hayan confirmado sus acusaciones. La definición del juez no es vinculante para una responsabilidad penal”, dijo.
La candidata a la gubernatura reiteró su confianza en el sistema judicial mexicano, por lo que decidió enfrentar la formulación de la imputación. Sin embargo, señaló que esta vinculación no altera el trato de presunción de inocencia sobre ella, además, el proceso formal de indagación es nuevo y “pasará tiempo hasta que se desahoguen las investigaciones”, por lo que ella continuará recorriendo todo el estado “a conquistar las almas” desde el próximo domingo, cuando iniciará de manera oficial su campaña.
“Esta vinculación no es una sentencia y por eso no afecta mis derechos políticos de votar y ser votada, por lo que entraremos con mucha confianza y fuerza a la campaña electoral, porque ahora hay una razón más para luchar: para que las instituciones cumplan con su vocación y sirvan a los chihuahuenses”, dijo.
Acusó que se trata de una persecución en su contra perpetuada por el gobierno del estado y “sus aliados políticos”, quienes construyeron un caso para que así puedan entregar la entidad a Morena.
“En lo jurídico seguiremos aportando lo necesario para demostrar que las acusaciones son falsas, y que este proceso es una persecución política basada en declaraciones amañadas, fabricación de pruebas, utilización de instituciones, amenazas y una confabulación de actores políticos”, apuntó.
A unas horas de iniciar su campaña electoral, la candidata agradeció el apoyo de sus simpatizantes y aseguró que no se dejará ganar por la “guerra sucia” de sus adversarios. Pidió no confundirse, pues este paso en el proceso judicial no indica que sea culpable.
“Quiero decirles que no nos van a detener, que aún con el proceso, vamos a salir a todo el estado a conquistar almas para cambiar el futuro de todo Chihuahua. (…) Seguimos juntos y más fuertes que nunca”, concluyó.
LP