De puerta en puerta: la doble campaña de los aspirantes independientes

META 21

César Navarro y Guillermo Hernández recorren calles de Guadalajara en busca de firmas para convertirse en candidatos a presidente municipal y diputado local, respectivamente;

Los candidatos van de puerta en puerta buscando firmas
Guadalajara /

En la esquina de las calles Santo Tomás y Abraham González, en la colonia San Isidro de Guadalajara, ocho hombres se reúnen para recorrer a pie el mayor número de cuadras posible solicitando firmas para dos candidaturas independientes: una a presidente municipal de Guadalajara, y otra para el Distrito 11 local. Como todos ellos se conocen por trabajar desde hace días en ese proyecto, la organización para su ronda de recolección de firmas es bastante sencilla: en menos de un minuto se dividen en dos equipos de cuatro personas cada uno, y se asignan las aceras sur y norte de Santo Tomás. Un simple "¿Listos? Vamos" es suficiente para iniciar el recorrido.

Al frente de un equipo va César Octavio Navarro Maldonado, o César Navarro, que es la forma abreviada con la que se presenta, empresario que busca convertirse primero en candidato independiente, y luego en alcalde tapatío. En la otra acera el aspirante es Guillermo Hernández Mayoral, cuyo sueño es convertirse en candidato a diputado local por el Distrito 11, al oriente de la ciudad y, por qué no, también en diputado y "ciudadanizar el Congreso del estado".

La tarea de ambos aspirantes y sus equipos no es sencilla, pues cada hombre o mujer que quiera ser candidato independiente a una alcaldía, o a diputado local, debe recolectar firmas equivalentes al uno por ciento del listado nominal de su municipio o distrito. En el caso de Guadalajara, se necesita un mínimo de 12 mil 434 firmas válidas para conseguir aparecer en la boleta. En su caso, César Navarro debe recabar en promedio 311 firmas por jornada, pues el plazo para todos los aspirantes es de 40 días, del 4 de enero, al 12 de febrero. Para el Distrito 11, la cifra está alrededor de 3 mil personas.

Con gorra de Los Ángeles Dodgers, un gafete del IEPCJ que lo identifica como aspirante, un teléfono con la aplicación electrónica para recabar las firmas, y una bolsa de cubrebocas desechables para regalar, César Navarro se detiene puerta por puerta para timbrar o tocar en el cancel con su llavero. Si no hay respuesta en diez segundos, se avanza a la siguiente casa; pero si alguien acude al llamado, entonces el aspirante se presenta y aprovecha para regalar un cubrebocas a la persona que abre la puerta. En un par de frases Navarro explica el motivo de su visita. Si la persona visitada accede a otorgar su firma y su fotografía, entonces uno de los acompañantes de los candidatos se queda a realizar el trámite, mientras el aspirante avanza a la siguiente puerta, ya que no hay mucho tiempo que perder, y son muchas las puertas a tocar.

Tanto César Navarro como Guillermo Hernández reconocen que si recabar firmas es difícil por la desconfianza natural hacia los desconocidos en una ciudad tan grande, ahora con la pandemia del covid-19 el esfuerzo debe ser mayor, pues es difícil encontrar grupos de personas en la calle, y organizar encuentros también se dificulta.

En el recorrido que MILENIO pudo presenciar, apenas se consiguió una firma por cada dos o tres cuadras visitadas, aunque tanto César Navarro, como Guillermo Hernández, mantienen esperanzas en el apoyo de familiares y amigos que les ayudan a recabar firmas entre conocidos, parientes y compañeros de trabajo; además de las reuniones vecinales que puedan lograr.

César Navarro trabaja en la presentación de un documento ante las autoridades electorales para solicitar que, ante la contingencia sanitaria mundial, se considere una reducción en el número de firmas a recolectar. ¿Tendrá éxito su petición? Navarro no se muestra muy confiado en ello, pero no pierde esa esperanza. En tanto, a seguir caminando las calles de una ciudad enorme en busca de más firmas y apoyos.

¿Vale la pena el esfuerzo? Sí, asegura Navarro Maldonado, y añade "gran parte de la población creemos que el sistema de partidos está colapsado, y necesitará de algún tiempo para volverse a reinventar. Y la vía independiente nos permite llegar para ser un gobierno que no tenga compromisos, y poder ejercer un gobierno más libre y contundente en políticas públicas".

¿Es difícil ser aspirante independiente? "Demasiado... demasiado", responde sin pensarlo Guillermo Hernández Mayoral. "Nos ponen trabas que no les ponen a los candidatos de los partidos. Pero creemos que nuestro esfuerzo será tomado en cuenta por la ciudadanía".


JMH

  • Manuel Baeza