Tras la elección más violenta de la historia, en su informe de observación electoral, la Organización de los Estados Americanos (OEA) recomendó al Instituto Nacional Electoral (INE) promover la adopción de un sistema de protección para candidatos, aspirantes y líderes políticos, que genere alertas tempranas sobre violencia política.
El informe preliminar de 33 páginas de la OEA destaca entre sus recomendaciones primordiales, que el INE debería promover sistemas de protección que ayuden en la medida de lo posible, a evitar los asesinatos, intimidaciones y atentados como los que se vivieron en este proceso electoral.
Las sugerencias son: establecer un marco legal con protocolos para abordar diversos tipos de violencia política y violencia electoral, en línea con lo recomendado por la OEA en 2018; activar mecanismos como la Estrategia de Prevención en Contexto Electoral desde el inicio del período electoral; comunicar de manera oportuna la información relacionada con la situación de violencia electoral y con el esclarecimiento de los hechos.
Adoptar un sistema de protección para candidatos y líderes políticos basado en criterios objetivos de evaluación del riesgo y asignación de mecanismos de protección con enfoques diferenciales de género y étnico; implementar un sistema de alertas tempranas sobre violencia política, que funcione de manera permanente en la recolección y análisis de riesgos para la prevención de este tipo de violencia.
Así como establecer espacios interinstitucionales para la evaluación de las alertas tempranas, el riesgo de violencia político-electoral y las medidas de protección. Este espacio debe garantizar la presencia de las fiscalías (federal o estatales), la Comisión Nacional de Derechos Humanos, así como los partidos políticos, periodistas y sociedad civil.
“La Misión expresa su más profunda preocupación por la extrema violencia que afecta a la política mexicana. La principal amenaza al proceso electoral han sido los altos niveles de violencia, incluyendo el asesinato de candidatas y candidatos, precandidatas y precandidatos, funcionarios públicos, equipos de las campañas, así como de familiares de estas personas.
“La Misión rechaza de manera enérgica todas las formas de agresión física o psicológica que se dieron en el marco de las elecciones, y que buscaron empañar y/o inhibir el ejercicio ciudadano de participación política en algunas entidades federativas del país. Si bien la violencia estuvo focalizada en determinadas zonas, la Misión expresa profunda consternación ante la brutalidad de los hechos y su impacto sobre la sociedad”.
Dificultad para desprender boletas, entre las observaciones
En las observaciones sobre el desarrollo de la jornada electoral destacaron que existió dificultad por parte de los funcionarios de casilla para “desprender las boletas de los talonarios por la línea punteada, teniendo que recurrir al uso de tijeras o una regla para facilitar el proceso y evitar que las papeletas se rompieran; y en algunos casos, por desconocimiento, se entregó a los electores boletas con la sección numerada del talonario”.
Por lo que pidieron evaluar el material y el troquelado de los talonarios de boletas de votación, y que se considere un mecanismo más fácil de corte que facilite la mecánica de entrega de las papeletas al elector a la hora de votar.
Casillas, sin suficiente espacio para evitar aglomeraciones
En cuanto a las medidas sanitarias, destacaron que se cumplió con el distanciamiento social, el uso de cubrebocas y la desinfección de manos a la hora de ingresar a los recintos, así como a su salida, pero criticó que en ocasiones, los lugares de votación “no eran lo suficientemente amplios y que se generaron aglomeraciones, sobre todo en centros que contaban con muchas casillas, donde también se constató confusión de los votantes sobre la ubicación de su lugar de votación”.
Destacaron las medidas de adoptadas para facilitar el voto de personas con discapacidad, sin embargo, en algunos casos se colocaron mesas altas que dificultaba la votación para aquellas que acudían en sillas de ruedas, lo que no les garantizaba la secrecía de su voto.
La OEA detalló que la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales les informó que recibieron 76 denuncias, la mayoría en el Estado de México, Oaxaca, Puebla y la Ciudad de México por destrucción de materiales electorales, compra de votos y recolección ilegal de credenciales de elector.
INE ratifica fortaleza institucional al superar pandemia, violencia y ataques
La OEA celebró la labor del INE al organizar las elecciones más grandes de la historia y en un contexto de pandemia, de violencia, de inseguridad y de ataques en su contra, lo que “ratificó la importancia que tiene para la democracia mexicana la fortaleza institucional, el profesionalismo y la experiencia de sus autoridades electorales autónomas e independientes”.
Destacaron que esta elección tuvo importantes avances como la implementación de medidas de acción afirmativa que permitieron la participación paritaria y de grupos históricamente excluidos, así como aquellos con prisión preventiva; la fórmula para asignación de escaños con afiliación efectiva y evitar sobrerrepresentación; garantizar equidad en la competencia al resolver 190 quejas de violaciones al deber de los servidores públicos, incluido el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La misión de la OEA estuvo encabezada por el abogado argentino Santiago Cantón y se integró por 36 integrantes de 16 nacionalidades, diez expertos en organización y tecnología electoral, financiamiento político-electoral, participación política de las mujeres, indígenas y afrodescendientes, justicia electoral, voto en el exterior, seguridad electoral, así como acceso a medios de comunicación, uso de redes sociales y libertad de expresión, quienes participaron en modalidad mixta: presencial y virtual.
JLMR