Este 6 de junio se llevarán a cabo elecciones federales y locales en todos los estados del país y la distribución del material electoral hacia todos los respectivos Consejos Distritales y Municipales ya inició.
En las semanas que restan rumbo a las votaciones, el procedimiento a seguir es la preparación del material, donde, primeramente, se lleva a cabo el conteo y sellado de cada una de las boletas electorales que se usarán en las respectivas casillas.
¿Qué pasa con las boletas electorales después de la elección?
El Instituto Nacional Electoral (INE) redactó un Reglamento de Elecciones donde estableció, entre otras cosas, el proceso de destrucción de todas las boletas que fueron o no utilizadas durante las votaciones, así como otros materiales electorales. Todo el proceso se puede encontrar en el Capítulo XI “Destrucción de documentación electoral”, y en el Anexo 16“Procedimiento para la destrucción de documentación electoral”.
Pasos a seguir
Antes de iniciar el proceso, es necesario contactar a una empresa que se encargue de la destrucción de los documentos de una forma amigable con el ambiente, que cubra el material de empaque, el precio del traslado y que pague por reciclar el papel al Instituto o a los Organismos Públicos Locales (OPL), quienes son los encargados de la organización de las elecciones en las entidades federativas correspondientes.
Después, el INE debe elaborar un calendario donde se establezcan las fechas de recolección, traslado y destrucción, así como especificar el tipo de vehículos que se usarán para transportarlas, ya sea que pertenezcan a la misma empresa o al INE. Para esto, la institución diseñó formatos específicos donde quede plasmado todo el procedimiento (Anexo 16.1).
Más tarde, se debe llamar a ciudadanos, consejeros electorales y representantes de partidos 72 horas antes del inicio de la destrucción electoral. Ellos serán los responsables de vigilar que se lleve a cabo la destrucción siguiendo las medidas de seguridad correspondientes y siempre de manera que no dañe el ambiente. Además, serán los testigos que especifiquen el estado de las boletas y materiales electorales antes de iniciar con todo el proceso por medio de un documento.
Preparación, traslado y destrucción
Para comenzar la preparación, se debe abrir en orden consecutivo cada paquete electoral, de acuerdo con el número de sección y tipo de casilla y recolectarlas en cajas de cartón o bolsas de plástico para acumularlas dentro del vehículo que las transportará.
Antes de cerrar las bodegas o almacenes donde se encuentren los materiales electorales, es importante que cada testigo verifique que no quede ninguna boleta o material electoral. Finalmente, después de ser destruidas todas las boletas y usadas para reciclaje, la empresa responsable debe entregar una constancia donde especifique la cantidad de papel recibido.
Boletas que no deben ser destruidas
A pesar de que todas las boletas electorales deben ser destruidas cuando las elecciones finalizan, existen casos donde esto puede omitirse:
- Cuando las boletas sean objeto de los diversos estudios que realice el Instituto o el OPL respectivo.
- Cuando formen parte de investigaciones de la Fepade o la instancia respectiva en las entidades federativas.
EHR