Raúl Morón Orozco, precandidato de Morena al gobierno de Michoacán, consideró que Silvano Aureoles Conejo dejará un estado con muchos problemas financieros, sociales y de seguridad, al terminar su administración al frente de la entidad.
“Hay desencuentro con grupos importantes de la sociedad: con el movimiento social, con los maestros, con los indígenas, con el sector salud y con los estudiantes. No ha habido capacidad de diálogo y un acercamiento franco, abierto y transparente, que permita encontrar solución a los problemas que estos grupos tienen", indicó.
Dijo que los problemas se agudizaron porque Aureoles “partidizó el gobierno” y trabajó solo con un grupo de personas muy cercano a él, lo que a su juicio inhibió que el gobernante perredista encontrara suficientes respuestas para resolver los problemas de la entidad.
“La verdad es que no le ha ido bien al gobernador”, consideró.
Aseguró que parte del conflicto que no ha permitido avanzar al estado es la disputa que Silvano tiene con el gobierno federal que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Esta disputa que trae el estado con el gobierno federal nos ha afectado a todas y a todos; y también lo ha hecho con los gobiernos municipales. Yo fui presidente municipal de Morelia y la verdad no había posibilidad de establecer espacios de coordinación en muchos sentidos con el estado”.
Por ello, el también coordinador estatal en Defensa de la 4T aseguró que, de llegar al gobierno del estado, se asegurará de construir un ambiente de unidad entre todas la fuerzas políticas y grupos sociales.
“Hablamos de unidad plena, entonces son bienvenidas todas y todos, de todos los partidos políticos, no nada más del PRD. Acá son bienvenidos gentes del PRI que están llegando y de otros partidos y la sociedad civil”, dijo.
Al realizar un diagnóstico de la entidad que pretende gobernar, Morón Orozco reconoció que el tema de la seguridad y el conflicto magisterial son dos de los retos más importantes que se deben ser resueltos en Michoacán.
Como ex dirigente magisterial, dijo, sabe que “será importante responder a las demandas que los compañeros reclaman, honrar los compromisos que tienen con el gobierno estatal y ver con ellos de manera transparente, abierta, franca y objetiva qué sí podemos responder y qué no podemos responder”.
En cuanto al tema de la seguridad, aseguró que “vamos a apaciguar Michoacán” platicando con toda la gente que interactúa en las zonas más difíciles para tomar acciones.
“Tomando decisiones y haciendo que los tres niveles de gobierno puedan tener decisiones firmes donde sea necesario y llegar a acuerdos que permitan la pacificación del estado”.
Al referirse a sus contrincantes, Raúl Morón Orozco se dijo confiado pues “los números van bien”, se refirió a su adversario y ex compañero de partido Cristóbal Arias, precandidato a la gubernatura de Michoacán por Fuerza Por México, como una persona con mucha trayectoria pero que no representará ningún peligro porque “no alcanza a ser protagonista”. También dijo que respeta su decisión de haber salido del partido.
Finalmente, adelantó que la elección se polarizará entre él y Carlos Herrera, candidato de la alianza PRI, PAN, PRD, que, según el morenista, abandera un proyecto sin dirección.
“No hay ideología que se defienda con esa coalición. No hay visión programática en esa condición, es absolutamente pragmática y que tiene otros tipos de intereses y motivaciones con las que la gente de Michoacán no está coincidiendo”.
La elección al gobierno de Michoacán comenzará el próximo 4 de abril pero el precandidato informó que registrará su candidatura formalmente, entre el 6 y 10 de marzo.
JLMR