No ir a votar también es grave: Obispo de Torreón

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Luis Martín Barraza, hizo un llamado a la ciudadanía a que revisen los perfiles de los candidatos y se involucren en este proceso electoral.

Obispo de Torreón, Luis Martin Barraza Beltrán. (Mauricio Román)
Luis Alberto López
Torreón, Coahuila /

En el marco del arranque de las campañas electorales, el Obispo de Torreón, Luis Martín Barraza Beltrán, hizo un llamado a la ciudadanía a revisar el perfil de los candidatos antes de tomar una decisión y poner atención en que no tengan intereses creados, así como en su historial en materia de servicio social.

“Si traen una trayectoria de amafiamiento, que hacen sus élites, sus amiguitos y desde ahí siempre han funcionado así, cuidado. Que no traigan muchos intereses creados sea la persona o el partido”.

Indicó que es necesario revisar cómo ha funcionado su agenda social, pues los antecedentes de enriquecimientos ilícitos, las estafas maestras, las empresas fantasmas, triangulaciones espurias y los fraudes electorales son peligrosos.

“El que traiga ese ADN ni lo volteen a ver. Ojalá que haya vocación de servicio, es muy importante estar al pendiente de la historia de la persona, de la trayectoria del partido, de las leyes que propone en relación a la justicia social, a la vida, a la familia”.

El representante de la Diócesis de Torreón, señaló que hay conductas durante las elecciones que son cuestionables y elevadas al rango de pecados sociales, tales como la compra de votos.

“Es pariente del pecado social que le pega a las desigualdades. A veces quizá guardando las leyes electorales compran la voluntad y lucran con el hambre, las necesidades y la ignorancia de la gente”.

Berraza Beltrán pidió también a que la ciudadanía se involucre en todo lo que sucede en este proceso electoral, pues no hacerlo representa una conducta que contraviene a los valores de la iglesia porque sería como “pecar por omisión”, además de anteponer el bien común más que los individuales por apoyar un candidato.

“No ir a votar también es grave porque se tiene en las manos la salud, la justicia social, la familia y no te interesó. Votar porque a mí me va bien y no preocuparse cómo le va a todos también es un pecado social”.

AARP