El Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) necesita poner más candados para que las candidaturas de la comunidad LGBTTTIQ+, indígenas, afromexiquenses y con discapacidad, no sean objeto de simulaciones y fraude. Para ello requiere, como lo hace el INE, de mayor tiempo para verificar que cumplan los requisitos y no sea todo de buena fe, consideró la consejera electoral, Karina Vaquera Montoya.
En entrevista, luego de que ya se cumplieron 10 días de que personas de la diversidad sexual demandaron al IEEM revisar 11 de los 39 registros, por considerar que no forman parte de estos perfiles, la consejera dio a conocer que ya revisó los 11 casos y en todos presentaron alguno de los seis documentos que los lineamientos indican como válidos para reconocer su identidad sexual.
Uno de estos papeles era la declaratoria, bajo protesta de decir la verdad, que se manifiesten que son parte del sector de la diversidad sexual, indicando el género con el cual se identifican; el acta de matrimonio de personas del mismo sexo, expedida por cualquier entidad federativa; una credencial para votar con reconocimiento como persona no binaria; el acta de nacimiento con cambio de sexo; una resolución judicial de concubinato entre personas del mismo sexo o una carta de alguna asociación civil o colectivo que dé cuenta de su trabajo a favor de la comunidad LGBTTTIQ+.
Con solo uno de estos documentos, dijo, podría ser acreditada como parte de este sector; no era necesario cumplir con los seis requisitos.
Sin embargo, agregó, al revisar los expedientes sólo tres de estos 11 casos especifican el sexo con el cuál se identifican y en dos casos no presentaron programa de trabajo a favor de estos grupos, los cuales también eran requisitos para poder ser consideradas como candidaturas de las medidas afirmativas, por lo que deberán de revisar con más detalle estos casos.
La petición, acotó, fue dirigida a la consejera presidenta del Instituto, Amalia Pulido, quien seguramente dará respuesta en estos días a este derecho de petición, donde también había la posibilidad de recurrir a los tribunales, pero se agotó el tiempo para apelar legalmente el visto bueno que el Instituto dio a estos registros.
En espera de una respuesta
Una organización LGBTTTIQ, acotó, pidió que se tomen medidas pertinentes, se investigue y, si procede, se anulen 11 candidaturas porque de la revisión que hicieron, concluyen no pertenecen a estos grupos.
La consejera indicó que el Instituto revisa la elegibilidad de las personas candidatas en dos momentos, el primero es cuando se hacen los registros y el segundo cuando resultan ganadoras, y aunque los criterios no están dentro de la Constitución, existen lineamientos que fueron aprobados por el órgano electoral.
Cualquier fraude a la ley en estas acciones afirmativas se debe informar, no puede haber una simulación.
“Nosotros lo hacemos bajo el principio de buena fe, pero se debe analizar la situación concreta bajo los documentos que obren en expediente. Se tiene que perfeccionar el mecanismo como lo hace el INE, para evitar simulaciones y fraudes; se llevan un tiempo adicional para poder verificar si forman parte de esa comunidad y los tiempos acá son muy cortos, aunque eso no nos exime de responsabilidad”, abundó Karina Vaquera.
PNMO