Los abogados de Morena concluyeron que para poder cerrarle la puerta a la lupa de fiscalización del Instituto Nacional Electoral en los recorridos que arrancarán los aspirantes presidenciales el próximo lunes, el partido no puede entregarles recursos públicos. Por lo que las corcholatas tendrán que romper las alcancías y definir cuánto de sus ahorros invertirán para poder financiarse sus giras por el país.
El dirigente de Morena, Mario Delgado ofreció que el partido les entregaría un monto equitativo a Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal para las giras que arrancarán el próximo lunes y hasta el 27 de agosto, pues el partido cuenta con recursos suficientes tras tener previsto recibir casi dos mil millones de pesos de prerrogativas este año.
Sin embargo, en exclusiva con MILENIO, Mario Delgado ventiló que para evitar una lluvia de impugnaciones y denuncias por actos anticipados de precampaña, pero sobre todo, para cerrarle la puerta a la fiscalización del INE, los abogados de Morena le informaron que no puede repartir recursos públicos.
“Sí hicimos ese planteamiento, pero los abogados nos recomendaron que no, a mí me parecía que era lo más sano porque incluso ya lo había comentado con todos, que el partido iba a darles una cantidad pareja y nos lo tendrían que comprobar, pero sí hay riesgo de que vengan impugnaciones en ese sentido.
“Como son recursos del partido, entonces sí podría meterse la Unidad de Fiscalización del INE que no tiene muy buena reputación que digamos, es el órgano que ha sido utilizado para perseguirnos incansablemente”.
El excanciller Marcelo Ebrard incluso ha reiterado que esperarán a que el partido defina cuánto presupuesto recibirán, pero al momento de registrarse se les informará que ya no recibirán financiamiento para evitar “la persecución” del INE.
Mario Delgado consideró relevante hacer un paréntesis para destacar que aunque hay una nueva integración en el INE y un ambiente diferente, prefieren evitar que intervengan en este proceso interno del partido.
Ante el planteamiento de que la integración varió, pero las leyes y obligaciones de fiscalización siguen siendo las mismas y el partido tendría que rendir cuentas, el líder morenista explicó que ellos consideran que si se mantiene como un proceso de promoción interna y no político en busca de cargos públicos, el INE no tiene facultades de fiscalización.
“Sí (las leyes son las mismas), por eso era abrirle la puerta para que la autoridad electoral entre en un proceso al que no tiene por qué entrar porque es un asunto interno. No pueden porque no puede el INE intervenir en procesos internos, tenemos el derecho a la auto organización”.
Por lo que dejó claro que ahora será cada aspirante el que defina su estrategia basándose en el financiamiento personal con el que cuenta.
“Lo pagarán ellos, con sus propios recursos tendrán que organizarse porque justamente si había financiamiento del partido, los abogados nos dicen que sí podríamos ponernos en riesgo de que lluevan las impugnaciones, y ya sabemos que la autoridad electoral está atrás de nosotros, entonces estamos cuidándonos, estamos protegiéndonos.
“Y por eso sí les hemos pedido y es parte del compromiso, de que se conduzcan con austeridad, porque la gente los señalaría si hay derroche, si hay un exceso”.
Y aunque el líder de Morena señaló que la misión de las ‘corcholatas’ es posicionar al partido y no un cargo público o pedir el voto a su favor, deberán ser considerados como cualquier otro simpatizante que habla en cualquier punto del país de su simpatía por el movimiento de la Cuarta Transformación.
“Pues lo van a hacer como millones de personas, en favor de Morena, no hay ninguna distinción, claro que van a promover a nuestro partido”.
El acuerdo que firmaron la y los aspirantes de Morena pero también Gerardo Fernández Noroña del Partido del Trabajo y Manuel Velasco del Partido del Trabajo, indica que están obligados a generar movilizaciones austeras y rechazando cualquier tipo de financiamiento ilícito.
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