La abanderada presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, arrancó con sus “conferencias de la verdad” en las que cada día develará “una mentira del gobierno federal”.
Aseguró que estás presentaciones a medios obedecen a un ejercicio de derecho de réplica, en la que se le dará voz a millones de mexicanos a los que les han “cerrado la puerta desde Palacio Nacional”.
Indicó que, de acuerdo con la agencia SPIN, desde la conferencia mañanera que se realiza en Palacio Nacional, se han emitido “130 afirmaciones falsas, es decir, 130 mentiras”.
Gálvez dio a conocer que sus conferencias de la verdad se realizarán tres veces a la semana y únicamente durante el periodo de intercampaña, y cada día se desmentirá un dato del gobierno federal.
“En estos ejercicios de comunicación siempre les voy a dar un dato verificado que refleje el verdadero México, y así desmentir la cortina de embustes y calumnias que nos receta el inquilino de Palacio Nacional y su corcholata”, dijo.
Este lunes, informó que el sexenio más violento en la historia del país es el actual, pues en apenas cinco años han asesinado a 170 mil personas, muy superior a los 120 mil de la administración de Enrique Peña Nieto y 95 de la gestión de Felipe Calderón.
La aspirante presidencial afirmó que con estas cifras se desmiente la principal mentira del sexenio “que México está mejor que nunca”.
“La gran mentira es que México está mejor que nunca, la verdad es que López Obrador traicionó a México.
“El dato de hoy es que este es el sexenio más violento de nuestra historia. En los primeros cinco años de Felipe Calderón asesinaron a 95 mil personas, un promedio de 52 homicidios diarios. En el sexenio de Enrique Peña Nieto asesinaron a 120 mil personas, un promedio de 66 homicidios diarios. En los primeros cinco años de López Obrador asesinaron a 170 mil personas, un promedio de 93 homicidios diarios”.
“Estos datos comprueban que en materia de violencia y de seguridad México está peor que nunca”, enfatizó.
Al ser cuestionada por la exclusión de ciudadanos en las listas de plurinominales de los partidos, lamentó el hecho, aunque reconoció que ella “no puede dar órdenes en los partidos partidos”, al tiempo que afirmó que la inclusión y participación ciudadana es importante.
También, celebró las mediciones de diversas firmas en las que acorta la distancia en preferencia del voto con Claudia Sheinbaum, y afirmó que se debe al trabajo que ha hecho en que la reconozcan y porque la sociedad acepta que el país no marca bien.
En ese sentido, adelantó que mientras avance el proceso electoral se cerrarán las cifras de preferencias lo que obligará al gobierno federal a radicalizarse, aunque descartó “tenerle miedo al Presidente”.
“Son seis puntos arriba muy importantes. Había una embestida en los portales afines a la 4T, millones de pesos pagados para difamarme, agredirme. Y aún así tengo un crecimiento, los mexicanos ya saben quién soy. Este gobierno se va a radicalizar, pero no le tengo miedo al Presidente”, dijo.
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Además, afirmó que México y Estados Unidos comparten el dolor de los asesinatos del crimen organizado, el primero por las ejecuciones y el segundo por el consumo de fentanilo.
Al reunirse con integrantes de la American Society of Mexico, indicó que ambos países deben trabajar en una estrategia conjunta que elimine el trasiego de droga y evite el tráfico de armas y personas.
“Compartimos un dolor, mueren los jóvenes en Estados Unidos por sobredosis y en nuestro país mueren los jóvenes a manos de la delincuencia organizada por órganos, por asesinato, más nos vale que nos pongamos a trabajar de manera conjunta, que cooperemos y que hagamos una cooperación profunda y clara”, dijo.
Sobre la relación que mantendría con otras naciones, afirmó que el principal socio comercial de México es Estados Unidos, aunque reconoció el conflicto que tiene ese país con China, se puede beneficiar al país con el nearshoring.
En ese sentido, criticó a los gobiernos que consideró antidemocráticos como Cuba, Venezuela y Nicaragua, a los que dijo, no les dará juego y mucho menos invitará a que marchen sus ejércitos en los desfiles de independencia de México.
“Tengo dos brújulas muy claras. Una son mis valores, no me voy a relacionar con gobiernos autoritarios ni poco democráticos. Yo no voy a invitar a desfilar al ejército de Venezuela, de Cuba, o de Nicaragua el 16 de septiembre a México”, enfatizó.
LP