En Guerrero, 27 hacen campaña custodiados

Son medidas insuficientes, porque asignan uno o dos agentes por 150 sicarios: candidato en Cocula

El 20 de marzo pasado, Ramírez interpuso una denuncia por amenazas ante la fiscalía. A. REZA
Abraham Reza
Iguala /

La noche del domingo pasado, en el barrio de La Mahonera, un sitio disputado por tres grupos de narcotraficantes, el candidato a la alcaldía de Cocula por Movimiento Ciudadano, Erik Ulises Ramírez, estaba en un mitin diciendo que él conoce las necesidades de la gente cuando se soltaron los balazos.

Ramírez es uno de los 27 candidatos en Guerrero, de diferentes partidos y a distintos cargos de elección popular, que ya cuentan con medidas cautelares, según datos de la Secretaría de Seguridad Pública del estado. “Las medidas son insuficientes: nos asignan uno o dos elementos que no pueden hacer nada frente a los 150 o más sicarios”, se queja Ramírez.

Ahora se sabe que los disparos fueron una advertencia para que Ramírez se baje de la contienda, pues los Guerreros Unidos, los Tlacos y los Bandera quieren que gane Carlos Alberto Duarte Bahena, el abanderado de Morena.

“Eran como las siete de la noche cuando llegué a La Mohonera y los pobladores ya estaban espantados porque los habían amenazado por apoyarme”, cuenta Ramírez a MILENIO.

La fiscalía estatal ha ordenado medidas cautelares, pues diagnosticó que el candidato de MC está en inminente peligro. Entre las medidas está el realizar operativos policiacos en los alrededores de la casa de Ramírez, la asignación de escoltas personales y el monitoreo las 24 horas.

Ramírez fue alcalde, pero dejó el cargo luego de haber sido arrestado el 25 de octubre de 2015, en Cuernavaca, mientras viajaba con Adán Casarrubias, presunto líder del cártel Guerreros Unidos. Fue declarado inocente.

Diana Hernández, candidata de Morena por la diputación en Chilapa, también cuenta con medidas cautelares, pues participa en una zona disputada por Los Rojos y Los Ardillos, grupos que pueden estar detrás del secuestro de Ranferi Hernández, padre de Diana, así como su madre, abuela y chofer de la familia. Todavía se desconoce quién los torturó, los abandonó y quemó en la cajuela de una camioneta.

En los últimos tres comicios, en Guerrero la muerte se ha vuelto el sello. El 25 de noviembre de 2011, el precandidato del PRD a la alcaldía Chilapa, Antonio Hernández Godínez, fue asesinado a balazos dentro de su negocio. En mayo  de 2015, un comando mató de 15 balazos a Ulises Fabián Quiroz, también candidato al ayuntamiento de Chipala, pero ahora del PRI-PVEM.

En 2018 mataron a las precandidatas a diputadas de PRD y PRI, Antonia Jaimes Moctezuma y Dulce Rebajas. Durante esas elecciones también asesinaron a Orencio Bello, candidato a la alcaldía de Chipala, y la aspirante a diputada, Bertha Silva, ambos de Morena.


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