El secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso, mostró un sentido del humor al que estamos poco acostumbrados en una entrevista concedida a Eduardo Videgaray y José Ramón San Cristóbal, El Estaca, para el programa ¡Qué importa!, que se transmite en Imagen Televisión.
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- Me encargó mi mamá que te preguntara ¿qué vas a hacer ahora que dejes la política?, dijo Eduardo Videgaray al todavía canciller.
- Dile a mi jefa que le hablo al rato, responde Luis Videgaray, quien apenas puede contener una sonrisa.
Eduardo Videgaray contó que, en realidad, Luis Videgaray era un niño muy divertido “y lo sigue siendo”… hasta que llegaba el día del Informe Presidencial, cuando el ahora secretario se sentaba a la pieza interminable que se transmitía por televisión abierta.
“El problema era cuando llegaba el día del Informe Presidencial y nosotros éramos de la Héroes de Padierna y Luis se ponía a ver el informe porque no teníamos Cablevisión, no éramos fifís”, dijo Eduardo Videgaray.
Los entrevistadores llevaron un kit vivevive para el canciller para acercarlo a la cuarta transformación: una monografía de Benito Juárez, kilo de frijol sin gorgojo, un boleto VIP para viajar en el Tren Maya, el Real diccionario Chairo-español-Español-chairo.
La carrera política de Luis Videgaray no inició en el Estado de México, sino en segundo año de primaria, cuando organizó lo que él mismo llama un grupo de choque’ para exigir más recreo, con un resultado previsible.
“Fui expulsado”, dijo.
El canciller dijo que deja la Secretaría de Relaciones Exteriores y el servicio público con todas sus metas cumplidas y que además se dio el lujo de dejar la “peor entrevista” para el final.
OVM