La escasez de agua y los efectos del cambio climático no permitirán que la inflación baje, expuso la mayoría de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico).
De acuerdo con las minutas de la última reunión para definir la política monetaria, un miembro apuntó que los choques relacionados con las altas temperaturas son cada vez más frecuentes y severos, lo que deriva en efectos adversos sobre los precios que siguen aumentando.
Otro comentó que la inflación subyacente podría ubicarse por arriba de lo previsto, acercándose más a niveles promedio, por esta situación climática.
Por otro lado, la mayoría de los miembros de la junta, comentaron que esperan que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por su sigla en inglés) inicie los recortes a su tasa de interés este año; apuntaron que sus expectativas sugieren que el primer cambio se realice en junio próximo.
Apuntaron que de darse este recorte por parte de la Fed podría culminar el año con una caída en 75 puntos base.
El banco central destacó que la mayoría de sus miembros anticipa que la inflación de manera global continúe disminuyendo; además señaló que se espera que en la mayoría de las economías la inflación converja a su meta hasta 2025.
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Manejo prudente
Ante la reducción de 25 puntos base a la tasa de interés, para que cerrara en 11 por ciento, algunos miembros de la junta de gobierno apuntaron que se debe de continuar con un manejo prudente de la política monetaria.
Se reconoció el avance del proceso desinflacionario en México, no obstante destacaron que aún persisten retos y riesgos, en el entorno económico del país, pero a pesar de este panorama la junta decidió por mayoría reducir la tasa.
Banxico detalló que cinco miembros de la junta votaron a favor de la reducción de 25 puntos; el único voto en mantener sin cambios fue de Irene Espinosa Cantellano.