El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, habló por teléfono anoche con su homólogo mexicano, Marcelo Ebrard, con el fin de aclarar la propuesta de hacer una pausa en la relación bilateral planteada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, según han confirmado fuentes diplomáticas a Europa Press.
Albares ya había manifestado previamente la sorpresa del gobierno español por las palabras del mandatario mexicano que, tras arremeter contra España y las empresas presentes en el país, consideró que lo mejor sería una pausa en la relación. En este sentido, el ministro adelantó que intentaría aclarar el alcance de las mismas y su significado.
Igualmente, dejó claro que el gobierno de España “no ha hecho ninguna acción que pueda justificar una declaración de este tipo”, tras recordar que la relación entre ambos países es estratégica y que va “más allá de declaraciones verbales súbitas o palabras puntuales”. Asimismo, recalcó que España siempre defenderá los intereses de la nación “en cualquier circunstancia y ante cualquier país”.
La llamada entre Albares y Ebrard “transcurrió en el buen tono habitual entre ambos”, según han asegurado las fuentes consultadas, que no han brindado más detalles sobre el contenido de lo discutido por los dos ministros y si Albares obtuvo las aclaraciones que buscaba.
Los dos ministros tuvieron ocasión de reunirse el pasado 27 de enero en Honduras, coincidiendo con la toma de posesión de la nueva presidenta del país, tras lo cual el gobierno español concedió el plácet al nuevo embajador mexicano, que había sido solicitado en noviembre y cuyo retraso había generado dudas en México sobre si era una represalia por las continuadas críticas de López Obrador hacia España.
Interés en abrir una nueva página
El propio Albares había asegurado antes de las declaraciones del Presidente había “interés de abrir una nueva página” y adelantó que “en los próximos meses vamos a reforzar mucho las relaciones con México”, después de que el propio mandatario mexicano hubiera hablado también en este mismo sentido.
López Obrador se ha mostrado muy crítico con el legado colonial español, exigiendo en varias ocasiones que España se disculpe por ello. En este sentido, remitió en marzo de 2019 una carta al Rey Felipe VI reclamando que “el Estado español admita su responsabilidad histórica” por las ofensas cometidas durante la conquista y “ofrezca las disculpas o resarcimientos políticos que convengan”.
Hace unas semanas, sin embargo, sostuvo que las relaciones “están bien”, aunque reconoció que había habido discrepancias y que incluso ahora las sigue habiendo. En este sentido, se refirió al hecho de que nunca hubo una respuesta a su carta al rey.
“Lo tomaron a mal y ni siquiera me respondieron la carta”, señaló, lamentando el que el gobierno español no hubiera aceptado “ofrecer una disculpa para reiniciar una etapa nueva. Sin embargo, pues eso ya pasó, cada quien que asuma su responsabilidad”, manifestó, aunque consideró que el perdón es algo importante y pudo ayudar mucho.
Por su parte, el gobierno español ha minimizado en todo momento las críticas, que ha llegado a enmarcar en los debates internos del país azteca, y ha reconocido la importancia de la relación con México, al que consideró un socio estratégico, pero también ha dejado claro que no se disculpará por el pasado.
AMLO “no tiene problema” con España: Podemos
El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, aseguró que el presidente López Obrador “no tiene un problema” con España, sino con ciertas empresas que se oponen a su estrategia de crear un sistema eléctrico público.
Echenique comentó que conviene “ir más allá de los titulares” sobre las palabras del mandatario, y cree que sus declaraciones no denotan un problema con España sino con “algunas empresas”. Y es que subrayó que López Obrador quiere un sistema energético público en México, como Podemos aspira también en España, para que los ciudadanos paguen una factura de la luz más baja y está preocupado por las actividades en el país de compañías españolas como Repsol o Iberdrola, que no están contentas con esos planes.
“Con eso tiene un problema el Presidente de México, no con España, que es evidentemente es un país aliado y hermano de México”, aseguró el portavoz de Podemos en el Congreso.
Estupor y sorpresa en la prensa
En cuanto a las declaraciones de López Obrador, estupor y sorpresa son las palabras más utilizadas por la prensa española respecto a hacer una pausa en las relaciones con el gobierno de España, y también con las empresas, a fin de mejorarlas.
En sus ediciones impresas, todos los diarios del país destacaron las palabras del jefe del Ejecutivo mexicano y también la respuesta por parte del Ministro de Exteriores, José Manuel Albares, quien defendió que se habían hecho en un “contexto informal”, a preguntas de un periodista y no suponen una “posición oficial”.
La información publicada por la prensa española coincide también en que, con sus declaraciones, López Obrador ha intentado “desviar la atención” de sus problemas internos.
LP