El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y expertos en regulación sanitaria alertaron sobre la estrategia de confundir a la población sobre nuevo etiquetado frontal a través de publicidad engañosa” sobre sus alimentos y bebidas altamente calóricos, dañinos.
“Por ejemplo, algunas marcas buscan minimizar el impacto de los octágonos de advertencia usando empaques pequeños, cuando está claro que en este tipo de presentación también se debe incluir el nuevo etiquetado frontal. Otras, están optando por colocar en punto de venta y a la vista del público la parte posterior del empaque, en vez de la cara frontal que es donde van los octágonos”, explicó la química farmacobióloga Fernanda Castro Pantoja, experta en asuntos regulatorios.
En este sentido, dijo, hay casos concretos que van en detrimento de la salud de los mexicanos, como es el caso de la publicidad engañosa en bebidas que se hacen pasar como sueros rehidratantes.
“Hay marcas que se hacen pasar como sueros de grado médico destacando propiedades terapéuticas o rehabilitadoras en su publicidad porque tienen altas cantidades de azúcar o sodio. Un suero rehidratante con grado médico debe tener un registro sanitario y además no contiene los octágonos porque su regulación es mucho más estricta. Si no cuenta con ese aval es una bebida saborizada con publicidad engañosa”, aseguró.
Otro caso se refiere al de ciertos alimentos procesados que pese a tener octágonos de advertencia, aluden a cualidades nutritivas, estimulantes o de otra índole que no corresponden a su uso o función, lo cual es incorrecto.
“Hay diferentes etapas de aplicación de una política pública y en el caso del etiquetado frontal está iniciando la implementación formal. Muchos se están familiarizando con los sellos que ven en los empaques, pero los más ya los identifican. Ahora sigue informar a la población sobre cómo aprovecharlo en el ámbito de la nutrición destacando la facilidad que representa contra el etiquetado anterior”, dijo Carlos Cruz Casarrubias, investigador del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
Cruz Casarrubias, especialista en Nutrición por la Escuela de Salud Pública de México (ESPM), indicó que el nuevo etiquetado reporta múltiples ventajas, como la selección a partir del comparativo de sellos contra alimentos similares, regulación de declaraciones nutrimentales y reformulación de productos.
“Hay varias formas en que el etiquetado puede contribuir a mejorar la salud de las personas. Por ejemplo, mediante la regulación de otros elementos como las declaraciones nutrimentales y saludables, que se refiere a mensajes como 'contiene calcio, que te ayuda a crecer grande y fuerte'; que llevaban a las personas a tener interpretaciones equivocadas sobre la calidad nutrimental de esos productos (percibiéndolos más saludables) y la reformulación de productos, que se ha observado en muchos de los alimentos y bebidas empaquetados más consumidos en México”, añadió.
Llaman a comprar productos con el menor número de sellos de advertencia
Por su parte, Ana Munguía Serrano, investigadora del INSP, recomendó elegir alimentos con el menor número de sellos de advertencia. En caso de dudas entre dos productos de una misma categoría con la misma cantidad de sellos, aconsejó recurrir a la declaración nutrimental impresa en el empaque basada en una porción de 100 gramos o 100 mililitros.
“Con el etiquetado frontal se puede mejorar la calidad nutrimental de las compras. El objetivo de este nuevo etiquetado es tomar decisiones asertivas e informadas en materia alimentaria”, agregó.
El nuevo etiquetado frontal entró en vigor el pasado primero de octubre y deriva de las reformas aprobadas por el Poder Legislativo a la Ley General de Salud (LGS).
Establece que cualquier alimento o producto alimenticio que en su composición nutricional tenga sodio, azúcares, grasas saturadas o grasas trans en cantidades mayores a las establecidas, deberá incluir octágonos con la advertencia “alto en” indicando las sustancias antes referidas que superan el valor establecido.
JLMR