El gobierno federal anunció que acabará con el monopolio de las centrales de mezclas y serán los institutos nacionales de Cancerología y de Nutrición los encargados de la preparación, dispensación y control de más de 4 millones de medicamentos combinados a los pacientes internados por afectaciones oncológicas, requerimiento de antibióticos y nutrición parenteral.
"Se eliminará por completo la subrogación que genera encarecimiento, dependencia, insuficiencia y corrupción", explicó Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, aludiendo, aunque sin decir su nombre, al principal proveedor del servicio, a la Farmacéutica Pisa a través de la filias Safe.
Destacó que "a lo largo de más de 10 años se empezó a caer en un monopolio como los que hemos relatado ya en varias ocasiones y se privatizó de facto el servicio porque se desmantelaron las capacidades institucionales para tener centrales de mezclas".
"Hemos identificado ya que en al menos un par de los institutos nacionales de salud que están en la zona de Tlalpan, en la Ciudad de México, que existen las capacidades potenciales, existen las instalaciones físicas, existe una parte del personal necesario competente; se va a necesitar más personal especializado en el tema, aquí los químicos farmacéuticos juegan un papel crucial en este aspecto", precisó.
El proyecto del gobierno federal es que todos los pacientes que reciben medicamentos por vía venosa y requieren esas mezclas de medicamentos reciban estos tratamientos, mezclados por los institutos nacionales de salud, y sean suministradas por el personal de enfermería en la cama del paciente.
"Básicamente vamos a que se elimine la subrogación de servicios. No tenemos por qué asumir que el gobierno, el Estado nacional no es capaz de tener un servicio como este, en el pasado lo tuvo y puede tener nuevamente. Se crearán y equiparán centrales de mezclas para atender la demanda completa de los institutos y de los hospitales", comentó.
Van contra contaminación de medicinas
Asimismo, se garantizará el almacenamiento, conservación, distribución, capacitación de personal, equipamiento y la operación correcta del sistema para evitar casos de contaminación.
En el dictamen de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, derivado de la iniciativa de reforma que presentó en julio el diputado Mario Delgado para dar vida al nuevo Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), se estableció acabar con la subrogación.
La central de mezclas intravenosas del Instituto Nacional de Nutrición inició su actividad en julio de 1991 y efectúa alrededor de 53 mil 800 mezclas anuales, y Cancerología por arriba de 120 mil.
Así opera la empresa Pisa
De acuerdo con información pública, la empresa Pisa es la principal operadora de centros de mezcla subrogados de muchos hospitales públicos que otorgaba este servicio de mezclas con todo y el medicamento.
La compañía facturará al año unos seis mil 700 millones de pesos y da empleo a cerca de 14 mil personas. Opera tres grandes líneas de negocios: fabricación de medicinas y material de curación, preparación de mezclas y distribución de medicamentos.
La producción le representará ingresos por unos mil 400 millones de pesos. Posee diez plantas que generan al año dos mil 350 millones de piezas. La mayor parte son sueros inyectables, principalmente antibióticos. Cubren más de 500 unidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y mil 600 hospitales privados.
La preparación de mezclas forma parte de los negocio que ocupa 13 por ciento de sus entradas y, a través de su filial Safe, creada en 1995, se convirtió en el centro de mezclas de antibióticos, de nutrición y oncológicos más importante de México con 16 centros distribuidos en todo el país, desde donde atienden los principales hospitales tanto del sector privado como público.
El centro de mezclas en el IMSS, cuando estaba a cargo de José Antonio González Anaya, significó contratos anuales de alrededor tres mil millones de pesos.
Con el Seguro Popular, ahora desaparecido, estaba en seis estados: Jalisco, Sinaloa, Sonora, Guanajuato, Chiapas y Estado de México, con contratos que le reportan ingresos anuales de alrededor de dos mil 500 millones de pesos.
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