Hace 49 años ocurrió uno de los hechos más trágicos que dejó un saldo de 120 muertos en la Ciudad de México: El Halconazo, que se presentó apenas tres años después de la matanza en Tlatelolco, y en el cual, de nueva cuenta, los estudiantes eran el blanco por manifestarse.
"El Halconazo es historia del tiempo presente. Existe una memoria viva que reclama su derecho a saber qué pasó. No hay hasta la fecha ni verdad ni justicia, menos aún reparación; no se ha logrado en un ejercicio mínimo de restauración de la dignidad, al identificar a todas las víctimas de estos hechos", menciona Simón Hernández, colaborador del área de Defensa del Centro Prodh, en un comunicado.
¿Por qué lo hacían y cómo terminó? Aquí te contamos.
Antecedentes de El Halconazo
Estudiantes de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) combatían la imposición de una Ley Orgánica y pedían la democratización de profesores, así como la inclusión de alumnos de sectores marginados o con bajos recursos, y exigían al régimen una reforma política para acabar con el autoritarismo y los monopolios.
Tras un recorte presupuestal a la institución y luego de que ésta rechazara la petición de los estudiantes de participaran en la toma de decisiones de los consejos técnicos se convocó a una marcha, la cual se replicó en la Ciudad de México, con la participación de estudiantes de la UNAM y el Poli.
Las manifestaciones estudiantiles y magisteriales para cambiar la Ley Orgánica fueron un reflejo de la inconformidad social ante el sistema político de la época, que más tarde se convirtió en un recuerdo del derecho de la ciudadanía a recuperar los espacios públicos para manifestarse libremente.
El jueves 10 de junio
La Matanza del Jueves de Corpus, como también se le conoce, ocurrió el 10 de junio de 1971, cuando estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Instituto Politécnico Nacional (IPN) marcharon sobre Calzada México Tacuba con el motivo de luchar por la democratización de las universidades.
Un policía muestra el arsenal encontrado tras el enfrentamiento. (Fototeca Milenio)
Liderada por un grupo de alumnos que sostenían una manta con la leyenda "por la unidad obrero-campesino-estudiantil", inició la movilización en solidaridad con los estudiantes de Monterrey. El plan era marchar de la Normal, ubicada cerca de San Cosme, en la zona centro del entonces Distrito Federal, hasta la plancha del Zócalo, pero esto no sucedió, pues los manifestantes fueron interceptados.
A través de infiltrados del grupo de choque Los Halcones, los jóvenes fueron abatidos con balas de calibre 45 y carabinas 30 M-2. La persecución continuó por horas, tiempo en el que los estudiantes terminaron en hospitales, donde también fue amenazado e intimidado el personal médico que trataba de salvar a los jóvenes. De acuerdo con Farrah de la Cruz Cárdenas y Damián Mendoza, investigadores de la UNAM, su objetivo no era disolver la marcha, era matar.
Lograron su objetivo y al finalizar el jueves de Corpus Christi había 120 muertos y cientos de heridos de entre 14 y 22 años, entre los que había estudiantes, civiles y miembros de la prensa tanto nacional como internacional.
¿Por qué se llama El Halconazo?
El grupo paramilitar conocido como Los Halcones estuvo a cargo de una operación conjunta con instancias gubernamentales, cuyo propósito era generar terror y reprimir a los estudiantes. Sus integrantes fueron reclutados y entrenados por los gobiernos de México y Estados Unidos a finales de la década de los 60, según un documento de la UNAM.
Este grupo logró camuflajearse entre los estudiantes, pretendiendo ser alumnos de la preparatoria popular. Miembros de Los Halcones fueron identificados entre la multitud porque cargaban varas de bambú en la manifestación que luego fueron cambiadas por armas de fuego, otorgadas por los policías, quienes más tarde atacarían a los sobrevivientes de la masacre y amedrentarían al cuerpo médico del Hospital Rubén Leñero.
Un cartel que acusaba a Los Halcones de las desapariciones forzadas tras la masacre. (Fototeca Milenio)
Previamente, han existido organismos creados para la represión social, como la Brigada Blanca o el Batallón Olimpia, cuyos detalles y secretos continúan guardados ante la lucha de las víctimas para exigir justicia. Los Halcones fueron señalados por el Canal 6 de Julio por participar también en la matanza del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco.
El entonces presidente, Luis Echeverría Álvarez, fue exonerado jurídicamente de toda culpa en el 2009, debido a que no se poseía evidencia tangible de su participación en El Halconazo, a pesar de la gran cantidad de testigos y sobrevivientes, la matanza siempre fue negada por el gobierno.
LP