La casa ya carece de ventanales y sus cristales. ESPECIAL
El ex alcalde Mauricio Fernández Garza pagó caro el precio de donar sus techos españoles y arcos góticos de los siglos XIV y XVI al municipio de San Pedro Garza García, pues su antigua residencia, La Milarca original, quedó en ruinas.
Los cuidadosos y detallados trabajos ejecutados para la desinstalación de las históricas e icónicas piezas dejaron prácticamente destrozada la antigua casona del ex munícipe sampetrino, ubicada en la colonia Pedregal del Valle.
Durante un recorrido realizado por la plataforma MILENIO-Multimedios para reseñar el desensamblaje del primero de 10 tensores del techo mudéjar, tras 45 años de haber sido montado en parte de la mansión del empresario, luce ya con boquetes, escombro, adoquín despedazado, pedazos de concreto suelto y piezas empacadas cuidadosamente con plásticos para protegerlas de cualquier daño.
Los siete arcos góticos, los cuatro techos mudéjar, los portones y marcos de algunos de los cuatro edificios de la casona fueron desmontados en forma minuciosa y detallada, por lo que debieron demoler o derrumbar los muros y paredes.
Los daños a la infraestructura son visibles y forman parte del proceso natural de desinstalación que realiza una cuadrilla de trabajadores y staff de la compañía PMP Consultores, contratada por el Patronato del Museo de San Pedro para la supervisión y la gerencia del multimillonario proyecto integral y de construcción de La Milarca en el parque Rufino Tamayo.
La residencia carece ya de ventanales y de sus cristales, con un laberinto de estructuras metálicas de fierro color amarillo que alcanzan el techo y que son utilizadas para las labores propias del desmontaje de los tensores.
La antigua residencia de Fernández Garza se ubica en una casona edificada en los años 70 sobre la avenida Del Pedregal en la zona boscosa de la Sierra Madre, en la colonia Valle San Ángel, en donde hay una contigua más moderna de la misma familia Fernández.
De hecho el acceso principal y caseta de seguridad de la doble vivienda anuncia la leyenda: La Milarca; y acompaña el número del domicilio, visible desde la avenida Del Pedregal.
En junio del 2019, el Cabildo de San Pedro avaló la donación de los techos mudéjar y góticos con un costo de 50 millones de dólares a favor del municipio por parte de la persona moral Mauricio y Norma Fernández, Sociedad Anónima de Promotora de Sociedad y del propio ex munícipe sampetrino.
Los cuatro techos mudéjar de los siglos XIV al XVI y siete arcos góticos de los siglos XIII al XIV de la colección de William Randolph Hearst, el magnate norteamericano que inspiró el filme El Ciudadano Kane, fueron comprados por el ex alcalde sampetrino en Estados Unidos y Londres.
En junio del 2021 se informó que el proceso de ensamblaje único en el país se prolongaría durante seis meses en el recinto cultural en construcción en la zona de Valle Oriente.
Un año después, apenas el lunes pasado, antes de partir a España, Fernández Garza informó que el proceso de reensamblaje del cuarto techo mudéjar ya había iniciado.
Sin embargo, fue hasta este miércoles, cuando MILENIO-Multimedios reseñó el traslado y desmontaje de la primera pieza de ese techo con peso de 60 toneladas desde su antigua residencia hasta el sector Valle Oriente, donde se ubicará el museo, cuya inauguración está prevista en marzo del 2023
El techo que cubrirá la edificación principal del recinto se pudo armar gracias a un libro que se llama La carpintería de los Blanco y de los Alarifes, editado en 1727.