La presidenta de la Cámara de Diputados, Ifigenia Martínez, reafirmó el compromiso de mantener el equilibrio institucional, garantizar la imparcialidad y promover el diálogo entre las fuerzas políticas, incluyendo las minorías.
En el contexto de la discusión de la reforma al Poder Judicial, la legisladora de Morena se comprometió a evitar que el Palacio de San Lázaro se convierta en un espacio cerrado y a garantizar que las voces opositoras sean escuchadas para preservar la legitimidad del Congreso.
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Subrayó, sin embargo, que de manera paralela gestionará los intereses de su propio partido, “sin comprometer la imparcialidad del cargo”.
En un comunicado, Martínez llamó a los legisladores de todos los grupos parlamentarios a trabajar en la construcción de un México más fuerte, próspero y democrático, al tiempo de remarcar que existe un mandato del pueblo para fortalecer el marco jurídico del país.
“La unidad está en la lucha, en los propósitos y en la acción”, puntualizó la diputada presidenta.
Sostuvo que la coyuntura está marcada por la mayoría absoluta de Morena, pero insistió en que, como presidenta de la Mesa Directiva, trabajará por la cohesión interna del Congreso y la continuidad a las políticas públicas para fomentar el desarrollo de México.
La legisladora señaló que la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados es uno de los desafíos más importantes en su carrera política.
“Estoy muy agradecida y emocionada por la confianza que me han conferido para representarlos en la presidencia de la Mesa Directiva”, dijo.
Ifigenia Martínez ha sido tres veces diputada federal y dos veces senadora, además de economista por la UNAM con doctorado por la Universidad de Harvard y embajadora de México ante la ONU.
LP