A una semana de anunciarse que la Ciudad de México y área metropolitana pasaron a color verde del semáforo epidemiológico del covid-19, la Iglesia católica pidió a sus fieles mantenerse prudentes y sobre todo a seguir con las medidas sanitarias.
En el editorial del semanario católico Desde la fe, el clero de la capital del país explicó que el semáforo verde no significa que los ciudadanos deben de ser descuidados ante el covid-19, "tenemos una gran responsabilidad en nuestras manos.
La pandemia de covid-19 continúa y hay que mantener medidas sanitarias".
La comunidad religiosa de la capital del país señaló que el semáforo verde es el resultado de los avances en la campaña de vacunación. "De acuerdo con estimaciones del gobierno de la Ciudad de México, esto representaría el 85 por ciento de los adultos que habitan en la Ciudad de México", explicaron.
"Sin embargo, recibir la vacuna no es sinónimo de que la pandemia haya terminado: el riesgo del virus sigue latente, y las medidas sanitarias que se han vuelto parte de nuestra vida diaria deben continuar. Los contagios siguen y aún con la vacuna es frecuente conocer de casos en nuestro círculo cercano".
Para el clero de la Ciudad de México, el levantamiento de las restricciones significa que "como sociedad, tenemos una gran responsabilidad en nuestras manos. De nosotros depende que la reactivación de actividades no represente un alza en los contagios" .
Sin embargo, expusieron que durante estos meses del año se concentrarán una importante cantidad de fiestas civiles y religiosas que suelen ser celebradas con distintos tipos de reuniones, por lo que advirtieron que de no mantener las medidas sanitarias se vivirá un fin de año como el del 2020, sin la posibilidad de festejar en familia.
Los religiosos católicos finalizaron haciendo el llamado a la prudencia y a la sensatez durante estos meses que restan del año, pues "a cuidarnos para cuidar al otro y tener las mejores condiciones para realizar nuestras actividades".
JLMR