Dado que la propuesta de reforma electoral no pasará en el Congreso, ahora el Ejecutivo federal pretende realizar cambios a las leyes secundarias lo que significa una manera de llevar a los partidos políticos a la mesa de negociación, advirtió Ildefonso Guajardo Villarreal, diputado federal por Nuevo León, quien participó en una conferencia ante socios de Canaco.
Sostuvo que lo que pretende la Federación es llevar a los partidos políticos a la mesa de negociación.
La propuesta de reforma en las leyes secundarias contiene puntos tales como prerrogativas y multas de la organización interna del órgano electoral, así como el tema de equidad de género.
“Es un intento de traernos a la mesa a cambio de que hagamos algunas modificaciones constitucionales, me parece que no hay que caer en absoluto, trae aspectos atractivos'', enfatizó.
“Creo que no hay forma de que pase la propuesta del Ejecutivo y lo tienen bastante claro, por ello están ahora buscando realizar cambios a las leyes secundarias, no debemos caer en la trampa, porque es una forma de dividir a la oposición”, agregó Ildefonso.
Aceptó que sí es necesario realizar una reforma profunda, pero ésta se debería hacer después de 2024.
También comentó que si se dan esos cambios en las leyes secundarias correrán la misma suerte que la reforma eléctrica.
El diputado federal priista aseguró que esto provocará nuevamente el destino que tuvo la reforma eléctrica que se está dirimiendo en los tribunales, con amparos que promovieron empresas y todo está en el terreno de la Suprema Corte de Justicia.
Gustavo Madero compara propuesta con "manzana envenenada"
Por su parte, el senador panista Gustavo Madero, comparó la propuesta de reforma a una “manzana envenenada”, la cual por fuera parece muy bonita, pero por dentro está envenenada.
“Lo que expone la propuesta de reforma por ejemplo, reducir los sueldos de los consejeros, claro que atrae, pero lo que trae por dentro es un veneno para la democracia”, añadió el senador.
En la conferencia señaló que la democracia en este momento está en acecho no solo en México sino en el mundo.
Expresó su optimismo de que se pueda conformar una oposición fuerte donde puedan surgir varios candidatos presidenciales de todos los partidos, pero incluyendo reglas que emanen de la ciudadanía.
Dijo que tanto las elecciones en el estado de México en el 2023 como la forma de elegir a los candidatos a la presidencia para el 2024 deberán pasar “la prueba del ácido'', es decir, deberá ser con otro tipo de reglas que provengan de la ciudadanía.
“La apuesta para el 2024 deberá ser hacia la corriente política social-demócrata”, indicó Madero.
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