El mole, pozol, chorote, enchiladas oaxaqueñas, entre otros platillos típicos de la cocina mexicana tienen como ingrediente importante al chocolate de mesa, mismo que en un año aumentó 9 por ciento su precio en el mercado, según datos del Inegi.
En el marco del Día Nacional del cacao y chocolate, Alicia Páramo Ortega, directora general de Asociación Nacional de Fabricantes de Chocolates, Dulces y Similares (Ashoco), comentó que la inflación ya se refleja en la menor venta de su producto, principalmente en los últimos dos meses.
"No quiere decir que no se venda, pero si hay un consumo más moderado o que buscan opciones más accesibles (...) La inflación afecta por parejo, se refleja en el empaque y a todos, el chocolate de México, se bebe, come y unta, es más presente en todo el sureste, se bebe con leche y agua", expuso.
Datos de Inegi también revelan que, entre enero y julio de 2022, el volumen de producción de chocolate en polvo y tableta para cocina fue de 30 mil 172 toneladas, 4 por ciento menos que lo registrado en igual periodo del año pasado, siendo el volumen más bajo desde 2018 y la variación negativa más grande desde 2014.
"Todo nos afectó, la gasolina, los empaques, el azúcar, entre otros (...) las empresas del sector tuvieron que ser más creativos, pues también por la saturación de puertos no nos llegaban los materiales para trabajar", explicó.
Detalló, como ejemplo, que una empresa no obtuvo en tiempo el empaque para que su chocolate pudiera llegar al anaquel, así que tuvieron que buscar opciones, "ser creativos", para evitar que no llegue a venderse el producto, pese a que eso podía elevar sus costos.
Alicia Páramo Ortega remarcó que México es base importante para la industria global, porque gran parte del chocolate que se hace en el mundo, casi todo es con cacao de México; sin embargo, reconoció que hay un reto en su producción.
Problemáticas
Las principales problemáticas en México para el cultivo del cacao son plagas como la moniliasis presente en el país, parcelas abandonadas o cambio de cultivo, las plantaciones son adultas (más de 30), en un 60 por ciento al menos y los productores tienen una edad promedio de 55 años, en un 65 por ciento por lo menos.
"Por ello es imperativo buscar incrementar la productividad, a través de introducción de variedades mejoradas, tolerantes a las enfermedades y sobre todo inclusión de los jóvenes en el campo, para recuperar el orgullo por el cacao", dice la líder de Ashoco.
La realidad es que la industria enfrenta importantes retos como son la baja producción del cacao en México, que de 2003 a 2016 se redujo en 46.24 por ciento, estas cifras afectan principalmente a los campesinos. El país cuenta con las condiciones propicias para su cultivo y replicar los modelos exitosos de los estados más prolíficos, concentrados en Tabasco que aporta un 68.8 por ciento y en Chiapas con 31.1 por ciento, además de Guerrero y Oaxaca.
El consumo de chocolate per cápita en México es apenas de un kilo año, en comparación con otros países como Brasil que registra 1.6 kg. y Suiza con un promedio de 11.9 kg., esta disparidad de cifras nos lleva a replantear la necesidad de impulsar su ingesta, considerando los beneficios y el aporte a la salud de este producto orgullosamente mexicano.
"Nuestro compromiso como industria es trabajar todos los días para preservar el valor de un alimento milenario que forma parte de nuestras raíces como mexicanos, además de representar el sustento de cientos de familias mexicanas, que trabajan en este sector, es el principal motor que nos mueve a festejar y a impulsar con mucho orgullo, un año más del Día Nacional del Cacao y Chocolate, que se celebra el 2 de septiembre”, enfatiza Alicia Páramo.