El jueves 23 de abril de 2009, el secretario de Salud, José Ángel Córdova emitió un mensaje en cadena nacional para comunicar una serie de medidas extremas adoptadas por el gobierno encabezado por el presidente Felipe Calderón frente a la irrupción de una nueva cepa del virus de la influenza.
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Alrededor de las 23:00 horas, José Ángel Córdova informó que acordaron suspender clases en los planteles públicos y privados de todos los niveles educativos, desde preescolar hasta universidades, en el Distrito Federal y el Estado de México, el 24 de abril.
“Estamos ante la presencia de un nuevo virus de la influenza, lo cual constituye una epidemia respiratoria hasta ahora controlable, cuyos síntomas son: fiebre superior a 39 grados, que se presenta de manera repentina, tos, dolor de cabeza intenso, dolores musculares y de articulaciones, irritación de los ojos y flujo nasal.
“Vale la pena mencionar que el número de casos no ha crecido en comparación a los presentados en días previos. Los casos se han registrado particularmente en el área metropolitana de la Ciudad de México, dijo el secretario, acompañado por Armando Ahued Ortega y Roberto Martínez Poblete, respectivos secretario de Salud del DF y encargado de Despacho de la Secretaría de Salud del Edomex.
José Ángel Córdova pidió a la población alejarse de personas que presentaran infecciones respiratorias, lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, no saludar de besos ni de mano, no compartir alimentos ni cubiertos; cubrirse la nariz y boca al toser o estornudar y utilizar cubrebocas.
Las autoridades aseguraron que las unidades de salud habían sido dotadas con antivirales, antibióticos y material suficiente para disminuir el riesgo de contagio.
Córdova aseguró que actualizarían la información para evitar el pánico entre la población.
Pero no fue suficiente. El miedo y la incertidumbre se esparcieron entre la gente, incluso fuera de la zona metropolitana.
Al día siguiente, el 25 de abril, el presidente Felipe Calderón emitió un decreto con acciones en materia de salubridad para combatir y controlar la transmisión de la influenza estacional epidémica, que en los hechos fue una suspensión de garantías.
En el documento, la influenza humana AH1N1 fue declarada una enfermedad grave de atención prioritaria y el consejo de Salubridad, que depende del Ejecutivo, facultó a la Secretaría de Salud para asilar a las personas que pudieran padecer la enfermedad y limitar sus actividades cuando así se ameritara por razones epidemiológicas.
Además, se determinó la suspensión de clases durante dos semanas en todo el país y actividades laborales en las oficinas públicas.
Las autoridades instalaron filtros en centrales de autobuses y aeropuertos para inspeccionar a los pasajeros que pudieran ser portadores de gérmenes.
El decretó también otorgó al secretario de Salud la facultad de aislar personas, inspeccionar a todo sospechoso, ingresar a domicilios, regular el transporte, suspender actividades masivas y realizar compras discrecionales sin procedimiento alguno de licitación.
El gobierno centralizó la información sobre el número personas infectadas y de muertos a través de la Plataforma Electrónica del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica, pero la gente estaba aterrada.
Así, el 29 de abril, el Presidente emitió un mensaje a la nación en cadena nacional en el que aseguró que la epidemia de la influenza era una de las emergencias más graves que enfrentó el país en los últimos años y expresó sus condolencias a los familiares de quienes fallecieron por el virus.
Calderón Hinojosa anunció una serie de medidas adoptadas y pidió la colaboración ciudadana para cumplirlas.
“La lógica de las medidas preventivas se orienta a evitar el contagio, que precisamente se da cuando tenemos contacto con personas que posiblemente tengan esta enfermedad sin tomar las debidas precauciones.
“Y por esa misma razón, amigas y amigos, yo quiero exhortarlos a todos, a todos sin excepción, que en estos días de asueto que vamos a tener, en este puente que irá del 1 al 5 de mayo, te quedes en tu casa con tu familia; porque no hay lugar más seguro para evitar contagiarse del virus de la influenza humana que tu propia casa.
El gobierno determinó la suspensión de actividades del 1 al 5 de mayo, excepto en aquellas que afectan la provisión de bienes y servicios esenciales para la comunidad.
“Es decir, quedan exceptuados, seguirán trabajándose o seguirán realizándose actividades como las de policía, los médicos, el Ejército, las gasolineras, los Bancos, los supermercados, las tiendas, las tienditas, las farmacias, todo eso seguirá funcionando normalmente; los hoteles, los restaurantes donde no haya aglomeraciones; es decir, donde puedan, verdaderamente, tener el cupo para atender adecuadamente a sus huéspedes, especialmente si son visitantes de otras regiones o del extranjero”, dijo en un video.
Calderón expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas que fallecieron a consecuencia de la influenza y pidió a la ciudadanía extremar precauciones, aún si estas representaban una merma en los ingresos.
"Esta difícil situación nos ha permitido constatar, a pesar de su gravedad, que México tiene el carácter y tiene la capacidad para superar cualquier desafío. Que en cada mexicano hay la conciencia, la responsabilidad, la solidaridad necesarias para que juntos, derrotemos esta enfermedad, como lo vamos a hacer", dijo.
OVM