Con el objetivo de mejorar la atención prioritaria de grupos vulnerables en países de Latinoamérica y Europa, dio inicio el Congreso de la Federación Iberoamericana del Ombudsperson (FIO) con la participación de 49 titulares de organismos defensores de derechos humanos de 21 países.
Durante la ceremonia de inauguración, la titular de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM), Nashieli Ramírez, destacó que se debe fortalecer la madurez democrática en los países de la región para que los derechos humanos no sean comprometidos en tiempos de dificultad política.
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“Los organismos públicos de protección a derechos humanos estamos para evitar los retrocesos en la calidad del ejercicio de los derechos humanos para motivar su progresividad. Somos parte del estado del sistema de pesos y contrapesos motivando el control de constitucionalidad somos cercanos a las personas y nos debemos a ellas para mejorar uso de los recursos con los que contamos”, señaló la titular de la CDHCM.
Por su parte, el presidente de la FIO, Pablo Ulloa, destacó la importancia de la labor de los ombudsman de la región, pues su actuar puede influir en la credibilidad de la lucha por la igualdad de oportunidades y la soberanía de los Estados.
“Los derechos humanos, al igual que la soberanía de los Estados y la dignidad de nuestros pueblos siempre tienen que ser defendidos; quienes defendemos los derechos estamos llamados a reflexionar acerca del futuro comprometido del contexto político en que nos manejamos, por eso debemos ser cautelosos para evitar errores que puedan costar la credibilidad de nuestras acciones y con ello la credibilidad de nuestras naciones”, indicó.
De igual manera, hizo un llamado a todos los defensores de derechos humanos a poner mayor atención a la situación que se vive en Haití, donde los grupos armados realizan diversas violaciones a los derechos humanos con la finalidad de controlar al Estado.
“Haití es el reto de los defensores del pueblo de Iberoamérica porque si no elevamos nuestra voz y alertamos, estaremos ignorando probablemente la más grande violación de los derechos humanos que registrará en la región”, sentenció Ulloa.
Por su parte, la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez, colocó a la inclusión educativa como uno de los retos más importantes de la región, pues se debe dar un avance progresivo en la incorporación de poblaciones históricamente excluidas por su diversidad socio cultural o lingüística o por su condición de movilidad o socioeconómica de género o discapacidad.
Además, refirió que el derecho a la educación es “un derecho llave que abre posibilidades a otros derechos”, por lo que se debe avanzar hacia la construcción de una educación humanista, inclusiva, intercultural, democrática, con igualdad de género, crítica y también de excelencia.
LP