El Instituto Nacional de Migración (INM) detalló que ofreció servicio de autobuses a las personas que se encuentran en la caravana migrante, para que fueran trasladadas a las entidades donde les entregarían documentos migratorios para acreditar su estancia regular en México. Sin embargo, su propuesta fue rechazada ante las autoridades migratorias y personal de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), de manera directa, por los líderes de este contingente migrante.
Ante la negativa, el INM aseguró que mantiene abiertos los canales de diálogo y su disposición para auxiliar de manera inmediata a quienes transitan por carreteras del sureste mexicano. Principalmente mujeres embarazadas y menores de edad.
"El INM hace un llamado respetuoso para que la salud de menores de edad, mujeres embarazadas y personas con discapacidad o alguna enfermedad no se utilice con fines mediáticos. Si existe una urgencia médica, debe ser atendida en un centro de salud u hospital cercano por personal médico", detallaron en un comunicado, en donde el instituto afirmó que no se debe jugar con la vida de las personas migrantes.
Y reiteró que no pretende ni busca la separación de las familias, sino "mantener la unidad e integración de las mismas, así como la atención y salvaguarda de las personas migrantes, sobre todo los grupos vulnerables que viajan en caravana desde el estado de Chiapas".
Por lo que volvió a refrendar su compromiso de entregar tarjetas de visitante por razones humanitarias a quienes integran dicha caravana que partió desde el 23 de octubre.
"La autoridad migratoria cuenta con autobuses y alimento para que las personas extranjeras sean trasladadas a las entidades donde se les otorgarían tarjetas por razones humanitarias", aseguraron.
EHR