Jaime Rubiel González, especialista y referente latinoamericano en comportamiento humano y productividad, narró que en una empresa estaban preocupados por mejorar la salud de sus empleados por el alto consumo de bebidas gaseosas durante el almuerzo, pero ellos no abandonaban ese mal hábito a pesar de que el departamento de recursos humanos había organizado charlas para persuadirlos.
Como la empresa no había obtenido buenos resultados y no quería forzar a los empleados, decidieron colocar en el comedor varios refrigeradores con botellas de agua y sólo uno, al fondo, con bebidas gaseosas.
Rubiel González explicó que el resultado fue que se redujo un 11.8 por ciento el consumo de las bebidas gaseosas y aumentó 25 por ciento el consumo de agua, lo que convenció a los directivos sobre la efectividad de la estrategia, tanto, que decidieron continuarla sin mencionarla nada a nadie.
Sobre este ejemplo, Jaime Rubiel González explicó que esta misma estrategia se aplica en los supermercados, donde ponen al alcance de la mano las revistas y golosinas mientras los clientes hacen fila.
"Cuando la portada de una revista dice el secreto de alguien, de inmediato la tomas, pero jamás la hubieras visto si no la ponen frente a tus ojos mientras esperabas en la caja”, explicó.
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La primera moraleja, dijo el especialista, sería que entre más accesible se muestre algo, más probabilidades hay de que se consuma, y la segunda, derivada del ejemplo de la empresa, es que para motivar un cambio en los trabajadores sólo tuvieron que rediseñar el ambiente, lo que demuestra que la motivación está sobrevalorada.
Por lo tanto, señaló Jaime Rubiel, es posible inducir cambios positivos en las personas haciendo ajustes en el espacio donde se desenvuelven, por lo que el diseño de ambientes es muy importante para los hábitos de trabajo y consumo.
"Se deben diseñar los ambientes para tener cerca de tu mano las señales que disparan los hábitos que quieres incorporar en tu vida (...). Si quieres practicar guitarra, sácala del clóset, compra un pedestal y ponla en el centro de tu sala”, indicó.
Para el experto en productividad personal, el poder del diseño de ambientes es fundamental:
"Si bien no puedes controlar todos los ambientes, es posible intervenir algunos, como, por ejemplo, rediseñar tu escritorio para tener menos distracciones y fomentar mejores hábitos en tu vida laboral”, concluyó.