Hace unos días Donald Trump anunció su intención de retirar a su país de los acuerdos de París frente al cambio climático. La respuesta de muchos alcaldes que gobiernan ciudades fue la de refrendar dicho acuerdo, puesto que son las zonas más expuestas para ser afectadas por el cambio climático. El caso de la Ciudad de México es de gran importancia, no sólo para reducir nuestras emisiones de carbono (hasta ahora una política poco efectiva, pues se siguen construyendo vías para los autos que son grandes emisores de CO2), sino para generar las medidas de mitigación en el factor que más nos va a afectar para la sobrevivencia: el agua.
JOS