El director del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Luis Antonio Ramírez Pineda, y el titular del Instituto de Justicia Alternativa del estado de Jalisco (IJA), Guillermo Raúl Zepeda Lecuona, firmaron un convenio de solución de conflictos en las unidades médicas que estará vigente hasta el 15 de diciembre del 2022.
“El propósito es que cada unidad médica cuente con un área de mediación para atender cualquier incidente y generar una solución inmediata entre el usuario y el involucrado”, aseveró Ramírez Pineda.
El convenio de prevención de conflictos en los servicios de salud pretende disminuir las quejas por inadecuado trato, las demandas generales y, por el contrario, elevar la atención en la calidad que se brinda a la derechohabiencia.
Los intermediarios promoverán un innovador modelo de solución de controversias para generar una sociedad libre de violencia, dijo Ramírez Pineda.
El titular del organismo puntualizó que en el convenio se establecen las bases y criterios generales sobre los cuales se realizarán acciones de capacitación, cooperación y coordinación para lograr la meta de alcanzar altos niveles de calidad en la prestación de los servicios médicos.
Por su parte, Guillermo Raúl Zepeda Lecuona indicó que este convenio ofrece herramientas de diálogo y empatía, así como de capacitación al personal de unidades médicas que permitan aminorar los conflictos del ISSSTE.
Esta coordinación identificará áreas estratégicas para la gestión del conflicto y generar una mejor dinámica de trabajo. Además, se podrá otorgar un taller de sensibilización en el trato, cultura de paz, comunicación y derechos humanos.
A su vez, Ramiro López Elizalde señaló que esta firma de convenio forma parte del programa para Erradicar las Quejas en Unidades Médicas, el cual tiene el objetivo de establecer líneas de acción para mejorar la relación médico-paciente, certificar al personal de las áreas de atención al derechohabiente, trabajo social, asistencia de la dirección y jurídico como facilitadores para establecer los procedimientos de mediación correspondiente.
Con este programa, dijo, buscan establecer mecanismos de comunicación con el personal para conocer sus necesidades y mejorar la calidad de los servicios, así como implementar sanciones correspondientes en caso de incumplimiento o negativa del servidor público.
“Vamos a proteger, promover y restaurar la salud de los derechohabientes, otorgando servicios con calidad, oportunidad y equidad, cumpliendo la normatividad correspondiente”, agregó.
En 2019, el ISSSTE reportó que, del total de quejas recibidas, el 71.03 por ciento fueron por “mala atención de un servidor público del área médica, debido a deficiencia de servicio, despotismo o maltrato”.
Este año, Luis Antonio Ramírez Pineda informó que la cifra ha disminuido; sin embargo, es preciso contar con herramientas puntuales que generen un buen trato, respetando los derechos humanos y que solucionen los conflictos sin necesidad de generar demandas las cuales pueden durar mucho tiempo y representan costos innecesarios para el instituto y los usuarios.
JLMR