Una burla e insulto para las familias petroleras de México, la jubilación que tendrá Carlos Romero Deschamp, como empleado de Petróleos Mexicanos (Pemex), calificaron los hijos de Joaquín Hernández Galicia, La Quina.
Guadalupe Hernández Correa dijo sentir mucho coraje de que el ex dirigente nacional del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) se vaya premiado, después de toda la corrupción que imperó en el gremio, según ella.
“¡No es posible!, a pesar de todo le dan un premio con esa jubilación, tengo mucho coraje, hablo como la hija de un gran líder, por ese hombre que sí luchó y que por estorbarle al gobierno lo metieron a la cárcel”.
Guadalupe Hernández dijo no entender al actual gobierno federal, porque el manejo del caso, con una jubilación tan onerosa, representa, dijo, una burla y un insulto para la base trabajadora. “Es algo que agravia a las familias petroleras, a los verdaderos hombres luchadores y trabajadores”.
De nada sirve jubilar a Carlos Romero Deschamps del sindicato petrolero si no se le va a procesar por su "enorme corrupción", señaló Joaquín Hernández Correa, hijo de “La Quina”.
Romero Deschamps seguirá operando "desde las sombras"
Consideró muy injusta su jubilación, cuando, según él, a muchos obreros ni siquiera les alcanza para mantener a sus familias. Joaquín Hernández exigió investigar las denuncias en su contra, entre éstas las que presentó La Quina contra Deschamps por haber “saqueado y vendido los bienes del sindicato petrolero”.
“Si no lo procesan, de nada va a servir su jubilación porque él va a seguir moviendo los hilos del sindicato petrolero, desde las sombras se va a mantener en el poder”, aseguró.
Hernández Correa, quien actualmente es legislador local por el PAN y precandidato para diputado federal, dijo que la noticia de la jubilación no debió darla el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues no es el vocero de Pemex ni del STPRM.
“Aunque sea algo que marca el contrato colectivo, es exageradisimo, comparado con otras personas que se han jubilado y apenas les alcanza para subsistir con sus familias. Es un escándalo comparado con mucha gente que percibe quizá 3 ó 4 mil pesos por catorcena”.
Insistió en que Carlos Romero seguirá operando desde la clandestinidad porque tiene a todo el Comité Ejecutivo de su parte y no van a permitir un proceso democrático para elegir al nuevo secretario general. “Van a poner a un dirigente designado por él para controlarlo”.
Apuntó que debería devolver sus bienes ilícitos, pero cree que su jubilación es más bien una medida precautoria para protegerlo de las denuncias que existen en su contra desde 2019.
“Mi padre también interpuso denuncias de tipo penal en su contra por el robo de las propiedades del sindicato y su venta fraudulenta y por desestimar los contratos de trabajadores transitorios y de todos los trabajadores de Pemex, les cobraba una cuota por ir a laborar”.
Sostuvo como injusto que no se le procese, y en cambio, tenga la posibilidad de seguir obteniendo recursos de los trabajadores y de las propiedades que La Quina forjó antes de 1989.
JLMR