Priista desde 1987, Luis Videgaray Caso es uno de los principales personajes que aparecen en la denuncia presentada por Emilio Lozoya, ex director de Pemex. Cercano y de toda la confianza del ex presidente Enrique Peña Nieto, se describe al ex funcionario como el autor intelectual, el cerebro y Maquiavelo de la presunta red de sobornos y corrupción durante el sexenio anterior.
Durante su paso como titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) recibió el reconocimiento como Mejor Secretario de Finanzas del Año por las revistas Euromoney, The Banker y América Economía. Y, además, Foreign Policy lo eligió como uno de los 100 más importantes Pensadores Globales en 2014.
De acuerdo con Emilio Lozoya, fue Luis Videgaray el cerebro que desde su posición cercana al ex presidente tejió la red de corrupción en torno al sexenio peñista. Fue gestor de recursos y el encargado de acercar a empresarios, políticos y legisladores.
Todo lo hizo desde sus oficinas particulares y en reuniones en hoteles de la zona de Polanco, en la Ciudad de México.
En la denuncia de hechos ante la Fiscalía General de la República (FGR), el ex director de Pemex dijo que Luis Videgaray, quien también se desempeñó como secretario de Relaciones Exteriores (SRE), "abusaba del poder" como si fuera integrante del crimen organizado.
"En el marco de este ambiente de abuso de poder y corrupción, como si se tratase de crimen organizado, Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray Caso instrumentaron diversos métodos para conseguir recursos", para financiar su campaña presidencial en 2012 y presuntamente comprar la conciencia de los legisladores a favor de su proyecto político.
Según el ex funcionario, desde principios de 2012, Luis Videgaray era el encargado de ordenar la búsqueda de recursos ilícitos para los distintos propósitos, primero como el encargado de Asuntos Internacionales, pues su función era posicionar la imagen del entonces candidato presidencial.
Luis Videgaray también viajó al extranjero, a Brasil, y fue el principal interlocutor y la voz en el primer acercamiento con Marcelo Odebrecht, él construyó la red cercana con la empresa. Y, además, instruyó a sus colaboradores cercanos para que no se supiera nada de la relación entre el presidente electo y el dueño de dicha empresa.
Las instrucciones y encuentros las realizó desde sus oficinas en Montes Urales 425 y, durante el gobierno, en sus oficinas de Polanco en la calle de Julio Verne. Unos de los primeros recursos que recibió de 2.5 millones de dólares fue para el pago de asesores extranjeros.
Para realizar los pagos que debería hacer Emilio Lozoya, Luis Videgaray entregaba de manera directa tarjetas escritas a máquina de escribir o computadora con los nombres de empresas y montos a pagar. Su argumentación era "que no quería demoras ni contratiempos, pues tenía que rendir cuentas a Enrique peña Nieto".
Incluso, en el caso particular de José Antonio González Anaya y José Antonio Meade, Luis Videgaray ordenó que el dinero se entregara en portafolios de trabajo.
También instruyó a Emilio Lozoya a recibir a varios legisladores de oposición y entregar dinero –en un primer momento hasta 50 millones de dólares– y recursos adicionales de sobornos para que dieran su voto a favor de la reforma energética. Pues como secretario de Hacienda tenía que rendir un "informe puntual" de los avances de la reforma.
Luis Videgaray tenía el control del dinero obtenido, nadie podía tocar ni un sólo peso y se distribuía conforme lo indicaba el funcionario. Él apuntaba nombres de los legisladores y montos en efectivo entregados a estos, "llevaba un control puntual de los sobornos entregados".
El dinero para ejecutar los sobornos estaba a cargo de operadores del funcionario, quienes entregaban maletas llenas de billetes de diversas denominaciones, envueltos en bolsas grises y transparentes que se repartían en el estacionamiento o sótano del edificio de Montes Urales.
La denuncia indica que se utilizó a diferentes choferes que no se identificaban y las llamadas se realizaban desde teléfonos desechables y sólo referían que iban de parte de Luis Videgaray.
Y hasta utilizó obras de artes como pago del crédito de Grupo Higa para la casa de Manilalco. Y hasta fue la voz del presidente, según se manifiesta en la denuncia, pues a partir del momento de la adquisición de Agro Nitrogenados, Luis Videgaray dijo "éste es un tema del presidente, limítate a hacer lo que se te instruye. Yo hablo por él".
Hasta el momento Luis Videgaray no ha respondido de manera pública a las acusaciones realizadas por Emilio Lozoya.
En su último tuit, el 29 de noviembre de 2018, publicó un video de 3:37 minutos donde agradece a sus colaboradores en la SRE y deseó el mayor de los éxitos al próximo presidente Andrés Manuel López Obrador, "éxito en lo que venga… mucho éxito a México".
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