El director del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Juan Antonio Ferrer Aguilar, junto con otros 350 trabajadores se mantienen en calidad de rehenes en el edificio de Guadalupe Inn por un centenar de médicos de Oaxaca que denuncian haber sido despedidos sin justificación alguna.
Bertha Alicia Galindo, directora de Comunicación Social del Insabi, informó a MILENIO que desde las 13:00 horas llegaron los médicos oaxaqueños exigiendo establecer una mesa de diálogo con el pleno de todas las autoridades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), y rechazaron ser atendidos por Ferrer.
“Como a la una de la tarde llegó personal médico del estado de Oaxaca; exigían que estuvieran todas las autoridades de la Secretaría de Salud, IMSS, IMSS Bienestar, ISSSTE. (...) Es un grupo de gente que fue expedida por el gobierno de (Alejandro) Murat. Gastaron el dinero en otras cosas y dijeron que ya no había presupuesto para ellos, a pesar de que el Insabi ha entregado el dinero al Estado. Ellos dijeron que aquí se quedaban hasta que no llegaran todos los demás. No quisieron hablar con las autoridades del Insabi”.
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Por el momento, señaló, la policía local está cuidando y resguardando el edificio federal, pero no se descarta la intervención de la Guardia Nacional.
“El problema es que todos los trabajadores están adentro. Ni siquiera pudieron salir a comer ni nada, ahorita están ahí, están de rehenes. En el Insabi hay 450, pero ahorita en el edificio habrá 350 porque algunos están en Acapulco. Está el director Juan Ferrer, los coordinadores, gente de limpieza, subdirectores, de departamento y enlace, jurídicos de todas las áreas, médicos”, dijo.
“Seguro hay gente que tiene diabetes y no comió, tenemos gente de edad avanzada. Están desesperados queriendo salir. Yo me quedé afuera porque fui por mi niño. Salí y, cuando regrese, ya no pude entrar”, aseveró.
Por el momento, dijo, está la policía, quien, por el momento, “no puede intervenir por tratarse de un edificio federal. Ellos tienen orden nada más de cuidar. Entonces, no se descarta que llegue la Guardia Nacional, ellos serían los que podrían desalojar”.
EHR