La pluralidad política mexicana se instaló en las banquetas de Manhattan, pues al menos por unas horas, simpatizantes y haters de la cuarta transformación convivieron en Nueva York.
Con motivo de la transmisión de la sesión del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en donde ayer participó el presidente Andrés Manuel López Obrador, se instaló una pantalla gigante desde donde los “pro AMLO” vieron el discurso del mandatario y celebraron cada frase y anuncio del tabasqueño.
Dentro de las muestras de afecto al mandatario estuvieron presentes actuaciones de mariachis, danzantes y discursos de agradecimiento, pero el júbilo estalló cuando se transmitió el mensaje que López Obrador grabó exclusivamente para la comunidad migrante en la unión americana: “Los quiero mucho”, remató desde la ONU.
No obstante, grupos de oposición también se hicieron presentes, pues cuando el Presidente salió de su hotel rumbo a la sede de las Naciones Unidas, partidarios e inconformes se confrontaron; los gritos no se hicieron esperar, los insultos y acusaciones fueron los mismos de siempre, pero a miles de kilómetros de México.
Una decena de integrantes del grupo conocido como Frenna hizo frente a los más de 200 simpatizantes del tabasqueño y se enfrascaron en la lucha de consignas. “¡Rateros, traidores, debería darles vergüenza!”, gritaban los obradoristas.
Y en respuesta acusaban de recibo: “¡Comunistas, fuera Cuba de México, chairos, no aprenden, quieren más pobreza!”
En tanto, saltó a escena un grupo de manifestantes encabezados por Christopher Estupiñán, abogado de las víctimas del desplome de la Línea 12 del Metro.
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Advirtieron que su única intención es que el Presidente pida a los responsables de la obra dar la cara ante la tragedia y que se haga justicia, pero como no prosperó la confrontación cada grupo siguió su camino.
Mientras tanto, el Presidente estaba al interior de la ONU reunido con António Guterres, secretario general del organismo.
“Estamos muy orgullosos de nuestro Presidente, es el primero que nos voltea a ver, es el primero que está luchando contra la corrupción, que quiere tener un mejor país, por eso vengo, todos quisiéramos regresar a México y con él empieza este nuevo camino”, aseguró un migrante originario de Puebla.
La contraparte expresó una postura muy clara: “López Obrador nos quiere llevar al comunismo, quiere tenernos como Cuba o peor, ya vamos en ese rumbo. Qué no se dan cuenta que cada vez hay más pobres, que están matando personas y la violencia está imparable. Ofreció el cambio y estamos peor”, dijo un simpatizante de Frenna.
La policía de Nueva York se limitó a colocar vallas para limitar el movimiento de los manifestantes y evitar que entorpecieran la circulación vehicular.
Lejos de sus opositores, los migrantes agradecieron una vez más la visita del Presidente a EU y aseguraron que cada que pise territorio estadunidense se organizarán para ir a apoyarlo.
“¡Es un honor estar con Obrador! Compañeros, agradecemos su asistencia (...) hay que estar atentos para despedir a nuestro Presidente, ya va a salir y le diremos adiós como se merece”.
López Obrador se dio cuenta del apoyo recibido y, detrás de las rejas del edificio, salió a saludar a sus seguidores.
Como su seguridad en Estados Unidos está a cargo del servicio secreto, se retiró en medio de un fuerte dispositivo, dejando atrás a simpatizantes y haters.