El presidente nacional del PAN, Marko Cortés, afirmó que la intervención de la Iglesia con grupos del crimen organizado se da ante la “desesperación y el miedo” con el que vive la gente.
Esto, luego de que obispos de Guerrero buscaran, sin éxito, que los grupos del crimen organizado con presencia en la entidad acordaran una tregua; sin embargo, nadie cedió en su pretensión de controlar más extensión territorial.
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Al respecto, el líder del blanquiazul dijo que “Guerrero es claro ejemplo de la descomposición e ingobernabilidad que vive el país”.
En redes sociales, precisó que “la intervención de la Iglesia se da ante la desesperación y el miedo con el que vive la gente por la decisión del gobierno de dar abrazos a criminales, en lugar de garantizar paz y seguridad”.
La petición de tregua se dio a finales de 2023, luego de que los responsables de las diócesis de Chilpancingo, Acapulco, Tierra Caliente y Montaña dialogaran con el papa Francisco en el Vaticano sobre la crisis en esa parte del país.
Los acercamientos de los representantes de la Iglesia con líderes del crimen organizado fueron confirmados por José de Jesús González Hernández, obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa.
LP