Es necesario que el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 contemple recursos para la creación de un programa que atienda los problemas socioemocionales de niños, niñas y adolescentes, derivados del confinamiento por la pandemia de covid-19, advirtió la organización Mexicanos Primero.
La organización destacó que actualmente no existe ninguna política pública enfocada a la atención de la salud emocional ante el regreso a clases.
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“Si no hay en el presupuesto un programa público orientado específicamente a la atención socioemocional, no hay política pública. En este caso, nuestra preocupación es que solo existe un programa dirigido a media superior, pero hay un espacio grande dirigido a primera infancia , para educación básica, es decir estamos descuidando más de 24 o 25 millones de estudiantes.
“Es indispensable que esta nueva presentación del proyecto de presupuesto de egresos de 2022 considere la propuesta de crear un programa específicamente para la atención socioemocional y de salud mental de los estudiantes, esto requiere presupuesto y voluntad”, indicó Carlos González, investigador de la organización.
La organización presentó la tercera parte de los resultados de la investigación Equidad y Regreso, que arrojaron que debido al confinamiento por la pandemia, se incrementaron los problemas socioemocionales en menores de edad.
El estudio fue elaborado en una muestra nacional de 2 mil niñas, niños y jóvenes, entre 10 y 15 años del país, más de 90 por ciento manifestaron tener miedo y 19.7 por ciento podría tener indicios de depresión.
David Calderón, presidente ejecutivo de Mexicanos Primero, recalcó que lo socioemocional es primero; es condición para el aprendizaje cognitivo, pero es también aprendizaje en sí mismo. Más violencia y tensión implica menor aprendizaje, añadió.
“El regreso a actividades en las escuelas es un proceso, no el evento de un día, y así como el aspecto socioemocional fue el principal argumento del Presidente para empujar la apertura, debemos reconocer que los recursos, materiales, oportunidades y enfoques centrados en lo socioemocional corren el riesgo de quedarse en la sombra e irse empequeñeciendo.
“La evidencia, el enfoque de derechos nos hace decir: primero lo socioemocional. No es un contorno, no es un adorno, no es un complemento. La primera barrera al aprendizaje y la participación se vive en la dimensión socioemocional: la violencia, el miedo, la depresión, la frustración, el enojo, el desánimo no dejan aprender y dejan una secuela de bajo aprovechamiento”, agregó Calderón.
El estudio también indicó que 11 de cada 100 estudiantes han platicado menos que antes con los adultos que viven en su hogar, 35 de cada 100 estudiantes se sienten tristes de vez en cuando y 28 de cada 100 estudiantes reportaron que los adultos que viven en su hogar han peleado o discutido más o igual que siempre; finalmente 15 de cada 100 estudiantes han realizado menos actividades como leer, jugar, ver televisión o comer con su familia.
González destacó que las discusiones, peleas y el miedo afectan el desempeño de estudiantes tanto en lectura, como en matemáticas y añadió que los recursos digitales que la Secretaría de Educación Pública (SEP) ha ofrecido son insuficientes y dejan el peso de la responsabilidad en docentes y familias.
FLC