Las elecciones presidenciales de Estados Unidos serán ganadas por Donald Trump gracias al financiamiento, hasta cierto punto involuntario, por parte de México, quien con los bloqueos y estrategias que se realizan en la frontera están ayudando al cumplimiento de una de las promesas de campaña, un muro pagado por nuestra nación.
Una voz autorizada, Juan Martín Pérez, director de la Red por los Derechos de la Infancia en México, quien está al tanto de las acciones que se generan en la frontera norte, afirma que existen altas posibilidades de ver a Donald Trump en la casa blanca donde México ha sido clave para ver sus compromisos hechos realidad.
“Con alta posibilidad va a ganarla porque el juicio político no tiene mucho puerto, porque además México le está financiando la campaña de reelección porque le está garantizando que cumplió sus metas y con muy poco costo económico para los Estados Unidos”, dijo Juan Martín Pérez.
El director de la Redim, aclaró que la reelección del máximo mandatario estadounidense no es un aspecto favorable para nuestro país, ni tampoco para los países de Latinoamérica, siendo lamentable que el hombre más importante del país con la economía más grande del mundo se incline hacia la xenofobia y la violación de los derechos humanos.
“Cualquier lógica que signifique el violar derechos, estimular la xenofobia y el trato desigual va a romper los vínculos de solidaridad que tenemos en nuestros pueblos, al final la gente se encuentra, tiene familias, tiene códigos culturales que intercambian y la política migratoria no debe romper estos vínculos”, expresó.
“Será muy lamentable porque no sólo significa tener otros cuatro años de xenofobia, en el caso mexicano seguiremos siendo el patio trasero de los Estados Unidos y es algo que tenemos que cambiar”, sentenció.
Será hasta noviembre cuando se lleven a cabo las elecciones de los Estados Unidos, donde hasta el momento se tiene registrado que el índice de aprobación de Donald Trump es del 45 por ciento, de acuerdo a los instrumentos realizados por la empresa especializada Gallup, que señala un porcentaje ocho puntos inferior al promedio que han tenido los presidentes del país vecino del norte desde 1938.