México exhorta a la OEA no intervenir en asuntos internos de Bolivia

Ayer, la Organización de Estados Americanos expresó preocupación ante lo que consideró “el abuso de mecanismos judiciales" tras la detención de la ex presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez.

Áñez llegó al poder de Bolivia luego de una acusación de fraude electoral cometido presuntamente por Evo Morales. | AFP
Adyr Corral
Ciudad de México /

México, a través del director general de Organismos y Mecanismos Regionales Americanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Efraín Guadarrama, exhortó a la Organización de los Estados Americanos (OEA) no intervenir, ni polarizar en asuntos internos que corresponden a Bolivia.

Hacemos un recordatorio a la Secretaría General de la OEA para conducirse de acuerdo a sus facultades, fomentando el diálogo, el consenso y la solución pacífica de las controversias en el hemisferio, y no polarizando a la ya dividida organización. Esto incluye el evitar aquellos posicionamientos que busquen tener injerencia en los asuntos internos de Bolivia”, escribió el funcionario en sus redes sociales este lunes.

Ayer, la OEA emitió un posicionamiento donde expresó preocupación ante “el abuso de mecanismos judiciales que nuevamente se han transformado en instrumentos represivos del partido de gobierno”, tras la detención de la ex presidenta interina, Jeanine Áñez.

Ante este posicionamiento, Guadarrama insistió, retomado por la propia cancillería, que “la Secretaría General (de la OEA) debe atender la naturaleza colegiada de su mandato y abstenerse de confrontarse con un gobierno electo democráticamente como es el boliviano”.

Áñez, que es uno de los liderazgos más notorios de la oposición en el país andino, llegó al poder luego de una acusación de fraude electoral cometido, supuestamente, por el ex presidente, Evo Morales, en las elecciones celebradas en octubre de 2019.

En aquel momento, la OEA respaldó los señalamientos y Morales se vio obligado a renunciar al cargo y dejar el país en noviembre de ese mismo año en medio de fuertes protestas sociales. Cuando era buscado por el gobierno interino de Áñez para ser llevado ante los tribunales por sus supuestos delitos, Morales fue recibido en México y después en Argentina, hasta su regreso a Bolivia en noviembre de 2020.

El sábado 13 de marzo, tras darse a conocer la detención de Áñez, el histórico líder de izquierda pidió al gobierno encabezado por su ex ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce, que se “investigue y sancione a los autores y cómplices” de lo que denunció como un golpe de Estado en su contra.

La OEA subrayó en su reciente posicionamiento que, de acuerdo con lo que ha podido observar, “en los últimos meses se ha constatado la cancelación o sobreseimiento de diferentes juicios contra partidarios del MAS (Movimiento al Socialismo, partido político de Morales y Arce), así como amenazas de persecución judicial a políticos opositores al Gobierno. Lamentablemente, esas amenazas se han concretado en muchos casos”.

Por lo que el organismo multilateral, encabezado por el uruguayo Luis Almagro, consideró necesario conformar en el marco del sistema de la ONU y de la OEA una comisión internacional para la investigación de casos de corrupción desde el último período de gobierno del ex presidente Evo Morales hasta la actualidad, incluyendo el período del gobierno de transición encabezado por Jeanine Áñez.

Además de pedir que se remitan las denuncias sobre eventuales crímenes de lesa humanidad a la Corte Penal Internacional para que “el juzgamiento sea imparcial y atienda a variables objetivas de responsabilidad”.

Hizo hincapié en la necesidad de llevar a cabo una reformar al Sistema de Justicia boliviano y pidió la liberación de todos los detenidos en el marco de este contexto, “hasta contar con procesos y mecanismos imparciales para determinar responsabilidades como los señalados ut supra, y especialmente teniendo en cuenta la existencia de variables de persecución política”.

JLMR

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