Entre jaguares y leones, alistan guerra en Morena por sucesión presidencial

Esta noche, el tamaño de la bomba de Layda Sansores determinará el nivel de la guerra que ya no tiene marcha atrás.

El senador Monreal junto a Manuel Velasco en la sesión de hoy. | Jesús Quintanar
Jannet López Ponce
Ciudad de México /

La pelea por la sucesión presidencial se ha vuelto una selva, o un zoológico. Esta noche, un jaguar prevé detonar una bomba que dejará heridos y volverá salvajes a los más domesticados; mientras desde una de las jaulas menos cotizadas, un león atrofiado jura poder encarar a la manada más pesada. Es el show de Morena rumbo al 2024.

La gobernadora de Campeche, Layda Sansores, puso a todas las tribus morenistas a velar las armas para esta noche. Tras volver a su anterior presa parte de su manada, llegó la hora de cambiar de víctima. Una que tampoco les agrada a sus camaradas y que es mejor quitar del camino.

Este fin de semana lanzó la advertencia de que en su show nocturno, Martes del Jaguar, el dardo iría para Ricardo Monreal, el actual líder de la bancada de Morena en el Senado, fundador del movimiento que la llevó a la gubernatura y quien ha caminado por décadas de la mano del líder supremo Andrés Manuel López Obrador.

Esta mañana, en entrevista radiofónica, Monreal lo calificó como “algo insólito e inédito” y criticó que la ilegalidad con la que una gobernadora de Morena usa el poder del Estado para espionajes es una muestra más de cómo “la ley ya no importa y violarla es un deporte”.

Pero Monreal no es presa fácil. No es Alejandro Moreno que, a rugidos de jaguar, terminó cediendo y dejó los pataleos para servir a la causa. Monreal ha advertido que está dispuesto a enfrentar a su partido que criticó, se ha convertido en lo que juraron desterrar.

“Voy a agotarlo hasta la parte que corresponda, porque hay varias acciones que estoy en este momento valorando, pero ojalá no se llegara a ese momento y la serenidad y la ecuanimidad lleguen a todas partes porque será un camino sin retorno, yo no lo voy a aceptar, ni me voy a dejar ni me voy a rajar, voy a ir hasta el final.
“No es Campeche, no es la señora, es algo más profundo, es algo más fuerte, si yo no les importara ¿por qué tienen que hacerlo de esta forma, descalificando, cuestionando, amenazando, insultando? No lo entiendo, ¿por qué piensan que la seguridad electoral está de su lado? Están equivocados quienes piensen que será un día de campo la elección del 2024, están equivocados si piensan que esto es solamente una anécdota”, explicó.

Monreal advirtió que si esta noche la gobernadora de Campeche oficializa la guerra sucia en su contra con grabaciones ilegales, habrá iniciado una ruptura que será fácil de reparar. Y, por primera vez, sentenció que incluso, podría dejar a Morena.

“Creen que liquidándome previamente se alzarán con la victoria y con el triunfo electoral y no, así comienza los momentos de ruptura, lucha y ambición por el poder sin escrúpulos.
“Nos vamos a mantener hasta que la dignidad nos lo permita, si otra adversaria, simpatizante o aspirante a la Presidencia de la República utiliza este tipo de estrategias de descalificación, yo tengo que reaccionar, no puedo darle el silencio cómodo y aceptar los ataques. Si se insiste, no tendré otro camino más que buscar otros senderos. Nunca pensé que luchando por lo que soñamos iba a ser víctima de lo que reprobamos”, lamentó.

El nombre de Claudia Sheinbaum ha resonado una y otra vez. El rumor de que su amiga Layda hace el trabajo sucio en sus aspiraciones presidenciales fue mencionado por el propio Monreal, aunque la jefa de Gobierno esta mañana se deslindó de las acusaciones, pues sostuvo que “no hacemos campañas sucias ni negras contra nadie. A los únicos que les damos armas cuando entramos en debates internos es a los adversarios”.

Pero a Monreal le salió un defensor. Un fiel seguidor de peso un tanto ligero, pero de mucho ruido. Su asesor y suplente en el Senado: Alejandro Rojas Díaz Durán, quien advirtió que “a todo ‘Martes del Jaguar’ le llega su ‘Miércoles del León’”, y replicará 24 horas después a Layda Sansores el ataque a Monreal.

En MILENIO Televisión, Díaz Durán dijo que “después de someter políticamente a Alejandro Moreno para que el PRI entregara sus votos para que la Guardia Nacional pase a la Defensa Nacional”, ahora quieren eliminar a Monreal “porque les estorba por pedir un puso parejo”.

Así, esta noche, el tamaño de la bomba de Layda Sansores determinará el nivel de la guerra que ya no tiene marcha atrás. Porque dicen que no hay peor enemigo que un ex amigo. Y en Morena, el juego apenas está por empezar.


LP

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